BLOG VIAJE AL DESIERTO DE MARRUECOS, GIBRALTAR Y JAÉN

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INTRODUCCIÓN

El año 2009 viajamos un grupo de autocaravanas a Marruecos eligiendo la ruta por las Ciudades Imperiales y en nosotros se nos quedo un sabor algo agrio al no poder extender el viaje hasta el desierto del que teníamos en la retina ese poder de fascinación que el lugar desprende a los viajeros; en esa ocasión, pudimos contemplar desde lejos las primeras kasbas de adobe y estuvimos muy cerca de ver la sequedad del suelo en la antesala de la ciudad de Marrakech.

Parking Museo de la Navas de Tolosa

Nada más regresar contacte con la empresa www. marruecosrural .webs.com que se dedican hacer excursiones para viajes por el desierto. La verdad es que tenía un desconocimiento total de donde estaba el desierto y el tipo de desierto que quería ver. Las indicaciones que me mandaban no eran nada halagüeñas pues citaban una población llamada Hassi Labied que no viene en ningún mapa. El desierto que nosotros queríamos ver es el de las grandes dunas rojas, ese que vemos habitualmente en las fotografías o en el cine y que habíamos centrado en la duna Erg Chebbi y ellos me ubicaban el mapa cercano a la frontera con Argelia. Durante varias ocasiones nos intercambiamos correos, seguramente por su parte de saber el interés comercial y por mi parte en mantener la curiosidad y la posibilidad del viaje.

Nada más terminar el verano publico en el foro de AC Pasión la convocatoria “II segunda expedición a Marruecos”; en los primeros meses completamos la expedición de 5 autocaravanas que había fijado como tope para viajar al desierto, pese a ello, se formo una lista de espera y innumerables correos privados para incorporarse con nosotros, de no haber puesto limites es fácil haber conseguido un expedición de 10 o más vehículos.

Los meses pasan rápidamente y llegamos al mes de enero, aprovechando la feria de turismo “Fitur” acudimos varios foreros para recabar información de las empresas que ofrecen viajes al desierto de Marruecos. Una cosa eran las informaciones verbales que nos daban, pero en las ofertas por escrito duplicaban los precios de la empresa primeramente contactada, que será la que utilizaremos para la contratación definitiva del viaje.

Un mes antes de la salida no ponemos en manos de http://www.viajesnormandie.net/ ,como el año anterior nos ofrece los mejores precios del mercado Algeciras-Tánger 120 euros (I/V, AC+2 adultos) + 20 euros (I/V) por acompañante.

La expedición en total y abriendo un poco la mano la formamos 6 autocaravanas con un total de 27 personas, aunque nos conocimos una parte del grupo y hemos estado en comunicación permanente en la preparación de viaje; la otra parte no terminaremos de conocernos hasta la salida en Algeciras.

La fascinación que ejerce Marruecos y el miedo a lo desconocido son las variables que este país ejerce sobre muchos de nosotros. La mayoría de los aficionados al autocaravanismo no tienen ningún problema para viajar solos por cualquier parte de Europa pero cuando se cita Marruecos la cosa cambia. He podido comprobar como Marruecos produce sensaciones contrarias al viajero semejantes a países como la India o China.

La primera vez que viaje al tercer mundo fue a la India, fue tal el choque en mi corazón que por la noche no dormía, me duchaba tres y cuatro veces al día para quitarme la mugre y las miseria ajenas, en la mitad del viaje, tomamos la decisión de finalizada las excursionas nos enclaustrábamos en los lujosos hoteles, pero poco a poco nos dimos cuenta que en los rostros de miseria muchas veces había unos ojos de felicidad y terminamos el viaje codo con codo con la gente de las calles, por las tardes entrábamos en los mercadillos, paseábamos por su mundo con total tranquilidad y descubrimos como los extraños éramos nosotros y quien teníamos que dar un paso adelante en nuestras mentes éramos lo que tenemos asegurado nuestro futuro hasta la muerte. Esta experiencia nos sirvió como vacuna para entender que el mundo no es España, la forma de vida generalizada no es la europea, el referente mundial no puede ser la vida en New York. La vida tiene tantos matices y variables que lo mejor es tener los ojos, los sentidos y el corazón abiertos para disfrutar de las diferencias culturales, sociales y económicas que nos ofrecen cada país y que enriquece nuestra cultura viajera.

Marruecos es la aventura viajera más cercana a España que existe, tan solo nos separan 13 kilómetros para entrar en un mundo desconocido, según discurren los kilómetros el tercer mundo se hace patente y las imágenes desgarradoras aparecen por la ventanillas de nuestros vehículos como si asistiéramos a un documental de la “2”.

Somos dos países hermanados con culturas contrapuestas y con rivalidades semejantes a las que teníamos entre Portugal-España o Francia-España, países con los que poco a poco hemos sabido vencer las reticencias ancestrales de luchas fronterizas.

Los españoles somos herederos de la cultura judía, católica y musulmana, fruto de años de convivencia nos sentimos hermanados en la cultura marroquíes, por ejemplo, la cultura culinaria nos ofrece el Cuscus que es tan parecido a nuestro Cocido Madrileño, también encontramos semejanzas en guisos de verduras y el gusto exquisito por las especias; cualquier persona que haya visitado la Alhambra de Granada comparará que las mismas manos que trazaron las exquisitas decoraciones de sus patios y palacios los pueden volver a contemplar en la ciudad de Marrakech, en las Kasba de Taurint o en la ciudad de Xauen, lugares donde se refugiaron los numerosos artesanos que huían de la Península Ibérica con la conquista de Granada en 1492. El diseño de los regadíos de los palmerales del Valle del Draa no difiere mucho de la huerta de Murcia. Muchos de nuestros utensilios, nombres, apellidos, topónimos son fruto de la herencia musulmana.

En mi opinión, el turismo es una forma de redistribución de la riqueza, sobre todo a los países en vías de desarrollo. Si queremos no compartir nuestra riqueza directamente con los ciudadanos marroquíes que diariamente llegan a España con la esperanza de poder disfrutar un trocito de nuestro bienestar, la mejor forma de evitarlo es extender nuestra forma de ver el mundo acudiendo a uno de los países que forman el libro de las mil y una noches. Marruecos esta poniendo todo su empeño para modernizar sus infraestructuras y poder lograr equipararse con el nivel de vida que tenemos en la otra parte del estrecho de Gibraltar.

Bueno, si hasta aquí has llegado en la lectura, ahora viene lo bueno, pasó a descubrir lo que he sentido y disfrutado de este nuevo viaje por Marruecos.

VIAJE AL DESIERTO DE MARRUECOS

 

Día 25 de marzo de 2010 (jueves) 258 Km.

MADRID-MUSEO BATALLA NAVAS DE TOLOSA (JAÉN)

Salimos el día anterior al previsto con la intención de salvar el colapso que generalmente se produce en Semana Santa. Son las 19,00 horas cuando enfilamos la M-30 y en dirección a la A-4.

Museo de las Navas de Tolosa

Estuve mirando con antelación donde hacer la parada para la pernocta en el recorrido en dirección a la carretera de Andalucía; accidentalmente había llegado a mis oídos la inauguración del nuevo museo “Batalla de las Navas de Tolosa” y previa llamada para confirmar los horarios, pregunte la posibilidad de pernoctar, al ser positiva la respuesta hasta allí nos dirigimos, ¿Qué mejor que pernoctar en el parking de un supermercado?, hacerlo en el parking de un museo.

Ya anochecido el día enfilamos el temido puerto de Despeñaperros, atravesamos el desfiladero natural por el que circula la carretera y que en estos momentos se encuentra en construcción los futuros puentes y túneles que suavizaran la carretera, aún no están terminados e incluso parecen las obras abandonadas.

Son las 22,00 horas cuando cogemos la salida 257 en el municipio de Santa Elena, doscientos metros después llegamos al parking del museo, se encuentra muy bien iluminado, llano y según me explicaron es seguro; las coordenadas del lugar corresponden N 38,34306; W 3,54990. En este paraje nos quedamos y dentro de la soledad más absoluta.

Día 26 de marzo de 2010 (jueves) 404 Km.

MUSEO BATALLA NAVAS DE TOLOSA (JAÉN)-GIBRALTAR-ALGECIRAS

Museo de la Navas de Tolosa

A las 9,59 horas estamos en la puerta del museo a la espera de que abran; tenemos la sorpresa que la encargada del museo es nuestra amiga “Antonia” un profesional como la copa de un pino, que habíamos conocido anteriormente en Baeza y posteriormente en Sabiote; pertenece a la empresa www.atlanteturismo.com/ que ha ganado el concurso para la administración del museo.

La entrada al museo es gratuita hasta el próximo 1 de octubre del 2010, el horario es de martes a sábado de 10 a 14 y de 17 a 20.00 horas, y los domingos de 10 a 14 y de 15.30 a 18.30 horas. Información y reservas en el número de teléfono 953 664 178.

María nos explica concienzudamente en que consiste el museo, bueno, más que un museo es un Centro de Interpretación que la Junta de Andalucía ha puesto a disposición del público para poder comprender la mítica batalla de las Navas de Tolosa.

El edificio exterior es modernista con una extraña disposición geométrica en cuanto a las formas destaca en lateral un torreón que asemejaría al campanario de una iglesia católica o un minarete musulmán.

El titulo que el museo da a la exposición “la batalla que cambio el rumbo de la historia”. El interior esta dividido en varias salas que suben en altura hasta llegar a la zona exterior:

1)  Ruta de los Castillo y Las Batallas

La Provincia de Jaén sirvió de frontera permanente entre los dos mundos antagónicos formados por cristianos y musulmanes; es el territorio con más castillos, fortalezas y torreones de toda Europa.

2)  La Historia

Una rampa nos conduce por los diferentes pasajes que tuvieron influencia en el contexto histórico de la batalla. Traslada el tiempo hasta el día 16 de julio de 1212 o el día 8 de Sefar del 609, según el calendario musulmán.

3)  Asediando Al-Andalus

Es la parte dedicada a mostrarnos como fueron los movimientos en los ejércitos previos a la gran batalla, fue clasificada como una de las batallas más trascendentales del Medievo europeo.

4)  La Batalla

Se divide en tres espacios. El primero se titula “La ira de Dios”; el segundo “La gran caravana”; el tercero “La Batalla”.

5)  La Cultura de la Paz

Es un espacio audiovisual donde se proyecto una película dedicada a enfrentar nuestros actuales conflictos dentro de una cultura de entendimiento.

6)  El Mirador del Torreón.

La tercera y última planta es un torreón abierto al campo de batalla donde en 1212 se enfrentaron los cristianos y musulmanes, batalla que cambio la historia y probablemente el destino del mundo.

La tercera y última planta es un torreón abierto al campo de batalla donde en 1212 se enfrentaron los cristianos y musulmanes, batalla que cambio la historia y probablemente el destino del mundo.

Paneles informativos del Museo de la Navas de Tolosa

Históricamente en 1212 Europa se encontraba sumida en plena Edad Media. El medievo fue una época difícil en la vida, en nuestro continente había dos influencias producidas por los islamistas y cristianos. La iglesia católica ejercía una gran influencia sobre el poder político. El papa podía convocar la guerra santa para liberar los lugares donde vivió Jesucristo del mundo musulmán. La sociedad estaba dividida en varios estamentos, donde el rey y los señores feudales formaban la parta alta de la pirámide; el clero era el segundo estamento más y los trabajadores o siervos formaban los elementos más numerosos.

Por el contrario, los territorios que ocupan Al-Andalus habían alcanzado una gran prosperidad económica debido a su gran desarrollo agrícola y favoreció el crecimiento de la actividad comercial.

Durante muchos años la línea divisoria de ambos mundos fue una fuente inacabada de conflictos, muchas veces era también un importante negocio económico, los participantes y vencedores de las batallas se dividían las tierras conquistadas, lo que origino las formación de las ordenes religiosas con la intención de canalizar estos ingresos hacia la iglesia católica.

Armas de época en el Museo de la Navas de Tolosa

La península ibérica estaba divida por la mitad sur y levante, ocupada por el imperio almohade, siendo el río Tajo la frontera con el mundo católico, que a su vez se dividiría en tres reinos y sus respectivos reyes: Castillo, Aragón y Navarra, El retroceso del territorio musulmán entre el año 750 y 1195 era muy importante y se produjo la primera de las batallas importantes entre el rey Alfonso VIII de Castilla que había conquistado el castillo de Alarcos (Ciudad Real); en 1195 el califa Abu Yusul Al-Mansur planeo la Batalla de Alarcos que supuso una importante derrota de las tropas cristianas.

El rey Alfonso VIII hizo un llamamiento a la guerra santa contra el califa Al-Nasir (hijo de Al-Mansur). El Papa declaro la cruzada contra los infieles, y los cristianos acudieron en la ayuda del rey Alfonso VIII; por el contrario, el califa Al-Nasir proclamo la Yihad para luchar contra los infieles de Alá, y en todas las mezquitas del imperio almohade se predico la necesidad de la lucha.

El ejercito cristiano estaba formado por un ejercito profesional pero en su gran mayoría acudieron gran cantidad de voluntarios, atraídos por las expectativas económicas del botín y las influencias del clero.

El ejercito musulmán estaba formado por soldados llegados de todo el impero almohades, beréberes, árabes y kurdos, más al ser una yihad, atrajo a la guerra a numerosos voluntarios como una obligación religiosa.

El tiempo de preparación de la batalla fue muy importante y duro muchos meses, se calcula que el grueso del ejército almohade salió de Marrakech en 1211 y el ejército cristiano partió de Toledo en la primavera de 1212.

El encuentro fue en Despeñaperros los dos ejercito quedaron separados por el paso de La Losa. Los cristianos sabían que el avance a través del desfiladero era la muerte segura, según las crónica de la época, el pastor Martín Alhaja, señalo a los cristianos un paso alternativo que los musulmanes no vigilaban para acudir a un campo de batalla abierto sin obstáculos naturales.

Representación de la batalla de la Navas de Tolosa

Los reyes cristianos conquistaran la mayor derrota sobre el mundo musulmán, las crónicas cuentan como Al-Nasir ante el avance imparable de las tropas cristianas, y viendo como su suerte estaba echada, ordena tocar retirada y encabeza la estampida. Tras su huida cundió el pánico en las tropas musulmanas que se desperdigaron en todas las direcciones siendo perseguidos durante semanas por los cruzados hasta darles muerte.

La batalla de las Navas de Tolosa fue vista y narrada por la historia de diferente forma según el bando que lo refería, para los cristianos:

“El noble Alfonso, al observar que algunos de villana cobardía, no atendían a la conveniencia, dijo delante de todos al arzobispo de Toledo ¡Arzobispo, muramos aquí yo y vos! Aquel respondió ¡De ningún modo; antes bien, aquí os impondréis a los enemigos! A su vez, el rey, sin decaer su ánimo dijo ¡Corramos a socorrer las primeras líneas que están en peligro!... Entonces, el Rey dijo de nuevo ¡Arzobispo, muramos aquí. Pues no es deshonra una muerte en tales circunstancias! Y aquél le dijo: ¡Si es voluntad de Dios, nos aguarda la corana de la victoria, pero si la voluntad no fuera así, todos estamos dispuestos a morir junto a Vos!”

Recogido por Rodrigo Jiménez de Rada en “De rebus hispaniae” en el siglo XIII Historia de los hechos de España.

El bando musulmán se refiere a la batalla:

“Se dirigió contra los musulmanes el ejercito cristiano, en filas, como nubes de langostas. Los musulmanes resistieron heroicos, todos los voluntarios murieron mártires,…

Ejércitos contendientes en la Navas de Tolosa

Cuando los cristianos acabaron con los voluntarios cargaron sobre los almohades y sobre los árabes con inaudito empuje; más al entablarse el combate huyeron los caídes andaluces con sus tropas. Al-Nasír seguía delante de su tienda, un árabe llegose a él y descabalgando de su yegua le dijo: “Monta en esta que es de pura sangre… quizás Dios te salve con ella, porque en su salvación esta nuestro bien”. El degüello de los musulmanes duró toda la noche y las espadas de los infieles se cebaron con ellos y los exterminaron completamente. Los heraldos del rey Alfonso gritaban “Matad y no apresad, el que traiga un prisionero será muerto con él”.

Ibn Abi Zar “Rawd al Quirtas” siglo XIII.

Las consecuencias de la guerra fueron la entrada en un declive definitivo del poder musulmán en Al-Andalus y los cuarenta años posteriores se produjo lo que se llamo como “Reconquista”.

Según los cronistas de la época “nadie ni recogió los cadáveres musulmanes que quedaron en el campo de batalla, que eran veinticinco mil o treinta mil, pero gracias a un milagro sólo hubo veinte o treinta bajas en las tropas cristianas”. Lógicamente eso no puede ser posible, las bajas en el campo de batalla en ambos lados debieron ser más equilibradas, posteriormente, fueron muchas más bajas en las filas musulmanas; los ejércitos cristianos tenían ordenes de “Matad y no apresad, el que traiga un prisionero será muerto con él”.

Al día siguiente el ejército cristiano se dirige a Baeza y prende fuego a todos los refugiados en la mezquita y todos perecieron en su interior.

En Úbeda se ofreció un pacto para comprar la paz y sus vidas por una importante cantidad, pero las autoridades eclesiásticas no aceptaron el trato y la ciudad fue destruida y su población degollada.

Una epidemia de disentería y una hambruna hizo suspender las acciones contra el territorio musulmán, no sin antes tomar los castillos de Castro Ferral, Tolosa, Baños de la Encina y Vilches.

Reyes cristianos, museo de las Navas de Tolosa

Los reinos de Castilla se hicieron más grandes con la unión de León y Castilla; fue nombrado el rey Fernando III que se dedico en la conquista de los territorios musulmanes: Jaén, Cádiz, Murcia, Huelva, Córdoba y parte de Extremadura pasaron a incorporarse en la corona de Castilla.

La corona de Portugal se anexiono el suroeste de la península Ibérica hasta formar el territorio actual.

La corona de Aragón se extendió por sus tierras limítrofes de Valencia, Castellón y las Islas Baleares.

A finales del siglo XIII Al-Andalus solamente estaba formado por el reino de Granada que ocupaba las actuales provincia de Almería, Granada y Málaga, y se hizo vasallo del reino de Castilla, empezó a colaborar pagando importantes tributos.

La presión que ejercían los cristianos sobre los territorios de Al-Andalus era tan grande que la mayoría de la población se vio obligada a marcharse hasta el último reino musulmán de Granada, otros cruzaron el estrecho con destino a Marruecos, y una parte con el paso del tiempo se convirtieron en conversos y se les llamo mudéjares.

Los mudéjares, en principio, ejercían sus propias creencias pero fueron tolerados por sus importantes impuestos y la necesidad de sus habilidades artesanas, pero todos terminaron con el paso del tiempo en la marginación social.

Sin querer, tenemos en nuestras manos el pasado histórico del país que queremos visitar, Marruecos también es el origen y el fruto de nuestra propia historia; cuando veamos por sus calles: un herrero, un albañil, un agricultor o un comerciante, estaremos antes nuestra propia herencia, en alguna ocasión Marruecos y España eran el mismo país.

Una canción que retrata mi sentimiento es “No dudaría” de Antonio Flores cuyo texto dice:

Si pudiera olvidar

Todo aquello que fui

Si pudiera borrar

Todo lo que yo vi

No dudaría….

No dudaría en volver a reír

Si pudiera explicar

Las vidas que quite

Si pudiera quemar

Las armas que use

No dudaría….

No dudaría en volver a reír

Prometo ver la alegría

Escarmentar de la experiencia

Pero nunca, nunca mas

Usar la violencia

Si pudiera sembrar

Los campos que arrasé

Si pudiera devolver

La paz que quité

No dudaría….

No dudaría en volver a reír

Si pudiera olvidar

Aquel llanto que oí

Si pudiera lograr

Apartarlo de mí

No dudaría….

No dudaría en volver a reír

Prometo ver la alegría

Escarmentar de la experiencia

Pero nunca, nunca mas

Usar la violencia.

Puedes escuchar la canción de Antonio flores en : http://www.youtube.com/watch?v=t5zWfADKgGk

o la voz de su hermana Rosario en: http://www.youtube.com/watch?v=kyn1r1kmO4k&feature=related

Seguimos nuestro camino hacia el Gran Sur; volvemos a la A-4 en dirección a Gibraltar a donde llegamos pasadas las 17,00. Aparcamos en la Línea de la Concepción, en el lateral de la calle antes de la entrada a la aduana, es zona azul, las coordenadas corresponden con N 36.15726 ; W 5.35285 , previo pago de 4 euros dejamos la AC pegada a una camper y otra AC.

Todo queda en casa, izquierda o derecha

Atravesamos la aduana y simplemente nos piden los correspondientes carnets de identidad; nada más salir un taxista nos ofrece sus servicios; ya no podremos visitar los centros de interés turístico, pues no olvidemos que Gibraltar tiene horarios ingleses, no españoles. Finalizamos el trato con 40 euros durante 1,30 horas y por las zonas que no conocemos.

Empezamos la visita por el Faro de Punta Europa era considerado como un lugar santo por parte de los marineros españoles. El Príncipe Juan Doria, hijo del famoso marinero genovés Andrea Doria presentó una de estas lámparas de plata en 1568 como un agradecimiento por la captura de cinco galeones turcos en el Estrecho de Gibraltar.
El actual faro fue construido en 1704 y posteriormente adaptado según la orden del Gobernador Woodford el jueves, 26 de abril de 1838.

El día es claro y se puede ver con toda claridad el estrecho y África. En frente, a la izquierda, destaca una línea blanca y plana que dibuja la ciudad de Ceuta. A la derecha también se ve la ciudad de Tánger; anclados se encuentran los barcos dedicados al avituallamiento de gasóleo en alta mar y los petroleros esperan su turno para el vaciado en las refinerías cercanas.

Mezquita Ibrahim-al-Ibrahim, Gibraltar

En las inmediaciones y sobre un llano se encuentra la Mezquita Ibrahim-al-Ibrahim, que fue construida con las aportaciones económicas del rey Fahd bin Abdulaziz al-Saud de Arabia Saudí o también es conocida como la Mezquita del Guardián de las Dos Mezquitas Sagradas, el edificio religioso se encuentra situado en lo que llaman la Punta de Europa, en el extremo meridional de Gibraltar. Su edificación costó cinco millones de libras. Fue oficialmente inaugurada el 8 de agosto de 1997 y cuenta con una librería y una sala de lectura.

Nos adentramos hacia la roca por sus tortuosos caminos del Parque Natural; llegamos al monumento “The Pillars off Hercules”, constituye un espectacular mirador sobre el Mediterráneo; en la inmediaciones se encuentra la lápida de mármol colocada como recordatorio de la visita de la reina Elizabett II y el duque de Edinburgo realizaron a la roca entre el 10 y 11 de mayo de 1954 (me imagino que debió de levantar muchas ampollas entre las autoridades españolas de la época), es un punto ideal para ver como esta creciendo las edificaciones de la roca sobre los terrenos ganados al mar y la construcción del espigo de abrigo del nuevo puerto.

Los monos de Gibraltar

Subimos hacia la parte más alta de la roca donde se encuentra la Guarida de los Monos conocida como “Queen's Gate”. En esta ocasión no veo al gran mono macho y algunas hembras cuidan de sus crías, una de ella se encara conmigo, pues la miro a los ojos directamente, pero enseguida se le pasa su enojo y permite mi acoso fotográfico. Los monos más pequeños se suben en los hombros de mi mujer atraídos por su color oro y agarran los finos cabellos de mi hija intentando descubrir algún habitante (piojo).

La gran excursión sobre la roca es tener el contacto con estos pequeños primates que hace tanta ilusión a pequeños como a mayores. Nunca defrauda la cercanía de los simios pero siempre hay que poner barreras pues se trata de animales que viven en libertad, que están acostumbrados al contacto con el hombre pero no dejan de ser animales salvajes y de no atender a ciertas precauciones el contacto puede ser desagradable.

Víctor Manuel puso voz y música en sus estrofas a los “Monos de Gibraltar” y decía:

Como los monos de Gibraltar
tapan los ojos para no mirar
cruzan los dedos le piden al cielo
que un rayo divino le vuelva normal.
Como los monos de Gibraltar
tapan los ojos para no mirar
cuando le ven como baja a la calle
agarrado del talle hecho un brazo de mar.

Si quieres escuchar las letras y la canción completa puedes hacerlo en:

http://www.youtube.com/watch?v=pNFIhjuc2iU

Panorámica sobre el Campo de Gibraltar

 

En realidad no hablaba de los viajes, ni estaba relacionado con ellos, la verdad es que habla de personas marginadas y que algunos relacionan con el mundo gay o con los problemas de la transexualidad, pero las estrofas son perfectas para imaginar el mundo de los primates en Gibraltar.

La siguiente parada es en el lugar que ellos denominan “Site Of Old Williss Guard Roon”, se trata de un mirador desde donde se aprecia una de las mejores vistas sobre la parte baja de la Roca y sobre la Línea de la Concepción; las vistas sobre el horizonte no tiene fronteras, es difícil saber si ocultásemos el aeropuerto, donde empieza España y termina España, o mejor dicho donde están las tierras que obligatoriamente tuvimos que ceder al Reino Unido.

Después pasamos por el antiguo Castillo Morisco, con su aledaña cárcel, ahora esta en abandono porque se esta construyendo una nueva para los escasos demandantes.

Monumento Gibraltar

Por último, nuestro amigo el taxista nos deja en la calle Main street donde nos sumergimos en la vorágines del consumismo y sus innumerables tiendas dedicadas a la venta de productos electrónicos. Podemos comparar como los precios son mucho más caros que en España, pese a ser un puerto franco.

Preguntamos por el gran hipermercado abierto donde podríamos comprar productos de primera necesidad de origen inglés, pero nos indican que esta algo alejado para ir andando y lo dejamos para otra ocasión.

Caminamos hasta la frontera mientras en el horizonte la luna se adueña del sol y nos ofrece un estupendo ocaso sobre el aeropuerto del Peñón. Aquí damos por finalizada nuestra visita a la Roca.

Lo primero que hacemos es buscar un sitio para vaciar y llenar antes de llegar Algeciras; vemos un Elefante Azul – ya sin personal – en estos momentos es de uso automático, donde podremos vaciar (las oportunidades se deben de aprovechar), no encuentro un grifo para llenar el deposito de agua, las coordenadas del lugar corresponden con N 36.17372 ; W 5.37225 .

Un poco más adelante encuentro una estación de Cepsa donde repostamos gasóleo y pido permiso para llenar el depósito de agua (también se puede vaciar grises), de esta forma acudiremos a Marruecos con los deberes hechos, las coordenadas del lugar corresponden con N 36.1911 // W 5.38589 .

Anochecer en el aeropuerto de Gibraltar

Por último, acudimos al punto de encuentro marcado para la reunión, se trata del parking del supermercado Lidl Los Barrios, cuyas coordenadas corresponden con N 36,18136 //W 5,43948 . Una sorpresa para mi que todo el parking esta ocupado por decenas de autocaravanas, más parece el espectáculo que presentan una gran área de autocaravanas, la marea de vehículos abarca hasta todos los parkings cercanos, en total calculo que nos habremos reunido un centenar largo de autocaravanas, según los coches abandona el parking su sitio es ocupado por una autocaravana. En ese momento nos presentamos a la mayor parte del grueso de la expedición que han llegado, en el trascurso de la noche lo irán haciendo todos.

Ante este espectáculo decidimos adelantar un poco la salida para el día siguiente para evitar en lo posible el bloqueo en el puerto y quedarnos sin plaza; quedamos a las 5,30 para salir.

Día 27 de marzo de 2010 (sábado) Km 360

RUTA: Algeciras-Tánger- Meknès

Minutos después suena el despertador “Pipipiiiií, piii, piiiiii… Pipipiiiií, piii, piiiiii…”, son las 5,15 a.m.; enseguida compruebo que la gente se mueve a mi alrededor, mi sorpresa es que en las inmediaciones hay menos del 50% de los vehículos.

Estrecho de Gibraltar

Enseguida partimos para el puerto de Algeciras, nada más llegar un empleado de www.viajesnormandie.net/ nos esta esperando para ayudarnos en el embarque . A las 8 de la mañana embarcamos después de varios camiones en el buque rápido de Acciona (el precio este año ha sido muy competitivo 180 euros i/v; 4 personas y AC.).

Lo primero que hago nada más subir al barco es ir al despacho habilitado de la policía marroquí de inmigración para sellar la entrada –en esos momentos había cuatro personas en la fila– ; como nuestros pasaportes disponen del número de entrada del año anterior, mi sellado solamente se demora escasos segundos.

El trayecto es muy ajetreado en los momentos en que se juntan las fuerzas de las aguas entre el mar Mediterráneo y el Océano Atlántico, se puede apreciar visualmente por el color del agua, en el caso del Mediterráneo su azul es celeste y el océano es un azul oscuro. Nada más desembarcar nos encaramos a una de las mayores dificultades de Marruecos que es el paso por su frontera, enseguida acuden unos marroquíes que nos rellenan todos los datos que faltan al documento de Importación Temporal del Vehículo; con la esperanza de agilizar los tramites, les doy una propina, pero al final la fila se impone. No somos más de 20 vehículos por línea de entrada pero en cruzar este punto nos lleva más de una hora. Cuando nos va a tocar el policía marroquí ataviado en un uniforme azul celeste, que más parece un bedel de un hotel de tres estrellas en la Gran Vía, me hace gracia su semblante, pues interpreta su propia película diaria, va de adelante hacia atrás sin ningún sentido, entra y sale de la oficina como un profesional del ballet, por fin me toca a mi, me mira y me coge los papeles, tengo que esperar otros tantos minutos para que me los devuelva, un poco más adelante se encuentran otros agentes que deciden a quien abren los maleteros, parece que los extranjeros en AC no somos sospechosos de contrabando; un poco más adelante otros policías nos vuelven a pedir los papeles, y por fin… ¡estamos en Marruecos!.

Aguador de Meknès

Este año ha sido un paseo la entrada a Marruecos comparado con lo agobiante y estresante que supuso el año pasado por la frontera de Ceuta, como mucha gente opina pasar las fronteras marroquíes es toda una lotería y la es primera adaptación a lo que es norma, en este país estas situaciones no dejan de ser normales, en Marruecos “el tiempo tiene poco valor” y “las prisas matan”.

Lo primero que hacemos nada más pasar la frontera es ir a las oficinas de cambio de diferentes agencias bancarias que están dispuestas en la misma entrada al puerto. El cambio que nos hace este primer banco no es muy favorable 1 euro por 10,98 dirhams, cuando en Marrakech llegamos a cambiar a 11,05 dirhams.

Lo primero que me llama la atención es la cantidad de edificios en construcción que tiene la ciudad de Tánger, esta inmersa en una vorágine urbanística, muy parecida a cualquier ciudad española unos años antes.

Siguiendo las señalizaciones en dirección a Rabat, llegamos a la autopista de peaje que según me indicaron el frontera es la mejor ruta hasta Meknès, pese a que tiene una diferencia de casi 100 Km.

Souk de Meknès

Reconozco que es difícil conducir en caravana pues exige a los integrantes un esfuerzo suplementario, en estos primeros kilómetros no hay mucho rigor pero todos entienden que para llegar en grupo debemos de intentarlo.

Antes de llegar a Kenitra abandonamos el peaje para atravesar una autovía de doble carril con continuas limitaciones de velocidad pero que no entorpece nuestra buena marcha.

Enseguida vemos los grandes minaretes y una gran ciudad que es inconfundible, se trata de la ciudad llamada en francés Meknès y Mequinez en árabe; nada más entrar nos mezclamos en un gran mercado cercano a la puerta de Bab El Mansur; visualmente adivinamos un grupo de autocaravanas en el parking céntrico que será nuestro primer destino en Marruecos, las coordenadas del lugar corresponden con N 33º.53' 22'' ; W 5º 34' 03'' , el precio del día 30 dirhams.

La noche se nos echa encima y decidimos pasear por la Medina y que mejor que meternos en la plaza el Hèdime, este lugar trata de rivalizar con la plaza de Marrakech pero ni con mucho tiene sus atractivos.

Este primer contacto con la vida cotidiana en Marruecos lo dejamos para adentrarnos en las compras de los tradicionales comerciantes que se hallan en las inmediaciones de la medina, se agolpan como si se tratase de un rastrillo. Compramos naranjas y manzanas, nos mezclamos con la población local en busca de las mismas gangas que buscan ellos, pero la verdad no las encontramos.

Día 28 de marzo de 2010 (domingo) Km 425

RUTA: Meknès-Azrou-Midelt-Rissani

Al amanecer se escucha la llamada a la oración del almuédano más cercano y me hace levantarme para pasear por la ciudad que en estos momentos se encuentra literalmente abandonada. La plaza mayor esta completamente vacía y la puerta Bab el Mansur me permite hacer las fotografías sin ninguna persona, cosa improbable durante todo el día.

Puerta Bab el Masour en Meknès (Marruecos)

Las primeras mujeres comerciantes llegan de los pueblos cercanos y hacen su aparición con sus grandes bolsones sacados de un “todo a 100”; a su lado, un acarreador del mercado duerme dentro de su propio carro, seguramente no tuvo tiempo de acudir a su casa, quizás no tenga casa o viva muy lejos.

Intentamos buscar algún sitio abierto para tomar un café y nos internamos en la ciudad amurallada; la plaza Lalla Aouda se halla totalmente desierta, solamente se escuchan el sonido que emiten miles de vencejos que vuelan a la búsqueda de su preciados trofeos, tiene sus viviendas en los huecos sobre las murallas y en las casas de adobe próximas; en la plaza, destaca el enorme minarete verde, color del Islam, de la Mezquita Lalla Aouda; bajamos en dirección a la puerta Bab el Khènis donde se encuentra la plaza que tiene dos de los monumentos más importantes de la ciudad la Prisión des Chètiens y la Sala de los Embajadores; en sentido contrario accedemos a la calle Ksar Chaacha donde esta una de las joyas de la villa, se trata del Mausoleo del Moulay Ismail.

Cárcel de Extranjeros y Sala de los Embajadores en Meknès

De regreso al parking nos cruzamos con una pareja de novios que están haciendo un reportaje fotográfico en plena puerta Bab el Mansur, nos choca como a las 7 de la mañana puede haber un pareja de novios con dos fotógrafos; ¿se ha casado embarazada? ¿quieren estar solos y adelantan el horario para no tener compañía en las fotografías? ¿son de una región lejana y aprovechan la luna de miel?, no tengo respuestas a mis preguntas. Pido permiso al novio para fotografiar yo también la escena pero me lo deniega muy amablemente, imagino que un cuarto invitado era muy difícil de asimilar en el acontecimiento de la boda. La verdad es que la mujer no debía de ser muy agradecida porque no asoma ni las cejas por su traslucido velo, pero lo que más me llamaba la atención las posiciones que ocupaba la mujer vestida de blanco en la escena, poniendo unas caras de sometimiento y ocultándose el rostro entre el velo y el cuello del espléndido marido, parece que asisto a un baile de cortejo entre dos garzas imperiales, también destacaba en la escena, los enormes zapatos de la novia ¿qué talla gasta esta mujer? 40 o 42, como poco, eran más grandes que los zapatos del humilde marido.

Boda en la puerta de Meknès

A la hora acordada para la salida, empezamos hacer turnos para vaciar en la rejilla del parking habilitada para tal fin y nos encaminamos hacia las afueras de la ciudad para repostar y llenar agua en la estación de servicio situada en las coordenadas N 33º51'19''; W 5º34'49'' .

El día se espera muy complicado por la enorme distancia que nos separa del punto de destino; cogemos la N 10 hasta la ciudad de Azrou y hacemos la primera parada en el Bosque de Cedros; vemos el cartel del Cedro Gouraud y se trata de una pista no transitable para autocaravanas que enseguida nos hace retroceder para evitar meternos en un aprieto. La pista asfaltada sale desde la N8 en dirección a Ifrane, nos conformamos con la vista de los monos desde este trozo del bosque de cedros.

Nuestro siguiente punto es la ciudad de Midelt que podemos considerar la mitad del camino previsto para el día; llegamos antes de las 13,30 horas, nuestra intención es dejar la ayuda humanitaria que portamos en el Convento católico de la Kasba Myriem, situada en las afueras de la ciudad, nada más llegar al centro urbano nos ayuda el típico comisionista de tiendas que nos conduce hasta la kasba. Intentamos llamar en el convento pero no hay nadie y llamamos insistentemente en el Monasterio de Notre Dame del Atlas, pertenece a la Orden Cisterciense de la Estrecha Observancia o Trapenses; correspondiendo a nuestra llamada nos abre el párroco y le depositamos todo lo que portamos para que sea distribuido por las monjas. Nos enseña el interior de Monasterio y la pequeña iglesia, el conjunto más bien parece un oasis en esta ciudad tan caótica, se encuentra bajo la protección de un espacio amurallado de adobe donde se alza un pequeño campanario, el interior representa una iglesia de una sola nave con un tejado de madera y cañizo, destaca la escasa decoración y la sencillez de la disposición del mobiliario. En un lateral hay una pequeña ermita levantada en la memoria de los religiosos fallecidos en manos de los integristas argelinos, en el fondo han colocado las fotografías de los 7 hermanos de la orden que fueron secuestrados y ajusticiados en el Monasterio de Notre Dame del Atlas en Tibhirine-Argelia. Los secuestradores manifestaron «Les hemos cortado las gargantas a los monjes». Ocurrió el 21 de mayo de 1996. Nueve días después fueron hallados sus cuerpos. Aprovechamos el momento para rendirles nuestro propio homenaje “in situ” después de conocer esta tremenda noticia.

Monasterio de Notre Dame del Atlas, Midelt

Nuestro guía nos conduce al parking de taxis de la ciudad donde podremos comer tranquilamente con la promesa que después visitemos su negocio, que según nos adelanta tiene los mejores precios de la región, las coordenadas del lugar corresponde con N 32º 40' 51''; W 4º44'26'' .

De camino a la tienda de nuestro guía pasamos delante de una pequeña iglesia, según me dice era la iglesia del padre Daniel que murió la semana pasada, descanse en paz también.

Desgraciadamente cometemos un error de acudir a la tienda de este señor pues los precios no son nada ventajosos y terminamos después de perder una hora con el clásico tira y afloja del comercio marroquí, al final, nos sentimos enfadados y salimos apresuradamente, este tiempo perdido nos impedirá llegar pronto a nuestro destino.

El firme de la carretera hasta ahora esta en muy buen estado y nos disponemos atravesar el valle y las gargantas del Ziz. Las aguas frías del río Ziz bajan desde el alto de las montañas del Atlas, abriéndose paso y esculpiendo por la acción del agua el gran valle que nos lleva hacia el sur.

Estamos ante un ejemplo de montañas de calizas de color claro y obedece en su formación a un origen marino y se puede ver por los estratos uniformes que forman perfectas tongadas; atravesando la parte más alta llegamos al túnel de los legionarios, fue construido por la Legión Extranjera Francesa a pico y pala, con unos 50 metros de largo, en ambos extremos se encuentran las garitas para la permanente vigilancia, esta era considerada la frontera entre el norte y el sur.

Busco referencias y la panorámica se asemeja al Cañón del Colorado; hacemos un pequeño alto en uno de los huecos de todos los miradores que permite la carretera, desde donde podemos contemplar la limpieza del agua y la serenidad del paisaje.

Garganta del Ziz (Marruecos)

La tarde toca su fin y el sol incide paralelamente sobre el valle tomando un color más rojizo; nos tenemos que marchar apresuradamente para aprovechar la poca luz que aún nos queda, sobre las laderas aparecen los palmerales con las únicas formas de vida humana sobre este enorme territorio; el color del agua se va haciendo más turquesa y nos indica que estamos ante la cola de la nueva presa Hassan Addakhil construida en 1967, permite la regulación de 100 metros cúbicos de agua que abastece a muchos de los pueblos del desierto.

Mirador en el túnel del Legionario, Marruecos

La noche nos acecha antes de pasar por el Mirador de Zoula desde donde se contemplar unas maravillosas vistas sobre los palmerales y más adelante pasamos por el manantial Blue Meski, sendos sitios son de obligada la parada, pero tenemos que seguir el camino para ganar tiempo a la temida noche marroquí.

A nuestro paso por la ciudad de Erfoud la noche es cerrada y los problemas con la carretera empiezan aparecer, vehículos de tracción animal sin ninguna señalización, gente en bicicleta transitan de pueblo en pueblo sin luces, camiones sobrecargados circulan sin ninguna prisa, la gente cruza vestida de color negro, son tantos los incidentes que tenemos que reducir la velocidad hasta llevar un ritmo que nos demora la llegada; por fin llegamos a Rissani donde se encuentra nuestro guía que nos conduce directamente hasta el aparcamiento en el poblado, ya en pleno desierto, en Hassi Labied, la hora de llegada son cerca de las 22,00 horas, esto solamente nos pasará una vez y nada, más nos conjuramos la expedición, para evitar incidentes es mejor no viajar por la noche por las carreteras de este país.

Nuestros anfitriones nos han contratado el parking en un hotel o kasar donde pernoctaremos esta noche y dejaremos los vehículos alimentados a luz eléctrica durante los dos siguientes días para realizar nuestra excursión al desierto, se trata de la Kasbah Aubergue La Valé, las coordenadas son N 31º08'24.67 // W 4º01'24.17' ; el precio que pagamos es de 40 dirhans (noche) + 10 dirhans ducha.

Nos invitan al te berebere y hacemos una puesta en común sobre el recorrido y las actividades durante la visita por el desierto; como es muy tarde y estamos muy cansados nos recogemos en nuestras habitaciones móviles.

Día 29 de marzo de 2010 (lunes)

RUTA:Hassi Labied-Oasis Mezan-Oasis Yasmina

Haima en Hassi Labied, Marruecos

Me levanto pronto para contemplar exactamente el lugar en que me encuentro, la Kasbah se halla dentro de una de las calles polvorientas de Hassi Labied, predomina el color gris del suelo, en el frente, se encuentra el palmeral construido artificialmente que protege al pueblo del avance de las dunas.

El kasar donde hemos dormido ha sido construido totalmente en adobe y paja, esta todo abierto, cuento nos rodea tiene un aspecto frágil y a la vez delicado, estamos ante una arquitectura efímera, con una decoración sencilla en color azul, el interior del hotel mantiene el mismo aspecto, sobre la bóveda un entramado de madera y de caña, las paredes se decoran con los mantones que portan las mujeres berebere por la calles, sobre el suelo las alfombras con dibujos geométricos, las puertas están sobre arcos apuntados con formas arabescas.

En la parte trasera del kasar se encuentran varios camellos descansando; en un lateral del complejo veo un tubo que sirve para la evacuación de las aguas fecales sobre un pozo que hace de improvisado filtro, esto me imagino que tendrán que solucionarlo más pronto que tarde pues en breve espacio de tiempo tendrán contaminado todas las aguas en el subsuelo del pueblo.

Kasbah Aubergue La Valé en Hassi Labied, Marruecos

Poco a poco van llegando camellos desde todas las direcciones de la aldea para completar las necesidades del grupo, somos 27 personas más los necesarios para portear nuestros equipajes, serán en total cerca de 32 camellos los que formaremos una de las más extensas caravanas que hallan visto en la región, según llegan se van tumbando hasta que todo el grupo este completo.

Mientras nos dedicamos al shopping gracias a un vendedor que nos trae el primer articulo necesario para la visita al desierto, el pañuelo o turbante berebere, puede parecer que se utiliza como souvenir pero en este viaje es considerado como un articulo de primera necesidad, nos protegerá del sol, del viento, nos servirá para mantener la humedad sobre la cabeza y por la noche podremos utilizarlo como sabana para proteger y aislar nuestro cuerpo de las mantas de los camellos.

Repasamos los artículos que debemos de llevar al desierto: gafas de sol, crema solar, crema para el culito de los bebes (Natusan), botas de trekking, gruesos pantalones de algodón, agua, pañuelo para la cabeza y mi cámara en la mochila, no olvidaros nunca el agua que por mucha que lleves siempre será insuficiente.

Dromedario llorando

Cuando todo esta listo veo como el dromedario que me han asignado llora, ¡si…! verdaderamente esta llorando, una lágrima enorme aflora por sus párpados y la cara de lamento identifica lo que le espera, hemos recibido instrucciones de cómo deben de ser el tratados estos animales pues a partir de este momento nuestra vida dependerá de ellos.

El verdadero protagonista durante los próximos días será el camello –en este caso son dromedarios pues tiene dos jorobas–, es llamado el animal de la bendición de Alá, dicen que es sagaz como el elefante, dócil y manejable como el caballo, fuerte como el buey y más seguro que cualquier otro animal sobre la tierra. Su leche es mejor que la de la vaca, su carne más delicada que la del novillo, el pelo es más apreciado que cualquier lana merina, puede estar una semana sin comer ni beber, puede llevar en sus lomos una persona y más de 300 Kg. de carga.

 

Preparativos de la caravana

Nos van asignado el camello que debemos de montar, imagino por nuestro tamaño o altura, mi dromedario es el más fuerte y robusto; destaca por la silla que tiene, una manta especialmente decorada, sobre el apoyo de las manos han colocado un trozo de manguera de goma que me servirá de amortiguador y me dará mucho juego durante los siguiente dos días.

Enfilamos el camino del desierto por las polvorientas calles del poblado, en estos momentos están muy transitadas por los 4x4 que se mueven como pez en el agua, parecen su medio natural: ruido y polvo.

Abandonamos el pueblo y vemos junto al palmeral unas edificaciones con forma de cajones que sirven para retener la arena durante los temporales y así conseguir que el desierto no invada el palmeral y las huertas.

El color del desierto pasa del gris al amarillo según nos alejamos, con los avistamientos de las primeras dunas la expedición se pone en fila india y su figura se alarga asombrosamente sobre el horizonte.

El color de las dunas en esta hora del día es amarillo, poco a poco los restos vegetales desaparecen del paisaje, cuando llevamos media hora montados en estos animales aparecen la incógnita si seremos capaces de resistir dos días y medio a bordo de estas monturas.

Caravana en el desierto del Sahara

A las dos horas de la salida hacemos un pequeño alto en un oasis para refrescarnos de un pozo excavado en las entrañas del desierto, el agua tiene un especial frescor y tenemos tentaciones para beber pero ya sabemos que las consecuencias para un occidental pueden ser muy graves.

Proseguimos nuestro camino, ya muchos integrantes han abandonado la montura y caminan al paso de los camellos pero según nos confiesan caminar por la arena del desierto es lento y fatigoso, no se parece en nada al paseo sobre la arena de una playa.

A la hora de la comida llegamos al Oasis Mezzan, sus instalaciones son básicas, con cuatro jaimas pequeñas y una más grande que sirve de comedor. El trabajo de los guías es extenuado, después de la paliza a pie tiene que cuidar de sus animales, los quitan las ataduras de la boca y se aplican en las patas para evitar que se marchen libremente, comienzan a sacar agua del pozo, cada camello bebe cerca de 15 litros, mientras estos, sacan unas enormes bolsas de sus bocas, según terminan de beber se alejan libremente para comer los hierbajos que sobresalen de las dunas.

Oasis Mezan

El merecido descanso dentro de la jaima se ameniza con el clásico te caliente berebere, para almorzar nos preparan una estupenda y refrescante ensalada, pizza berebere y fruta. En realidad se llama pan berebere y es una de las especialidades propias del desierto, es curiosa su preparación pues no se necesita una cocina, condición necesaria para la vida nómada. Se emplea arena calentada con brasas y se cubre la masa con la arena, se dora por un lado y se da la vuelta. Para servir le quitan los restos de ceniza y de arena, y se sirve siempre caliente. Los ingredientes son vegetales: zanahorias, cebolla, tomates mezclando con cordero troceado y muy especiado.

El sol se apodera del exterior los que nos hace retrasarnos hasta que la temperatura de la arena permita caminar con comodidad para personas y animales; mientras eso sucede los guías toman sus tambores para deleitarnos con los sonidos del desierto.

Cuando sentimos que la temperatura ha bajado los grados suficientes comienzan los pastores a reunir todo el rebaño de dromedarios, que se encuentran dispersos por cientos de metros del oasis, les quitan las cuerdas de las patas y con un nudo especial se las ponen sobre sus dientes para formar la caravana, los animales protestan enérgicamente pues saben que ahora les toca a ellos su parte de esfuerzo pero son lo suficientemente dóciles para asimilar su trabajo.

Cuidado a los dromedarios

El color del desierto esta cambiando ahora tenemos una tonalidad ocre porque el sol esta cubierto por nubes, esto es muy malo pues empieza a soplar el viento lateral que contiene arena en suspensión, nos azota fuertemente y por momentos esperemos una fuerte tormenta de arena, la única protección que tenemos es nuestro pañuelo que nos protege toda la cara.

Las dunas cada vez se hace más altas lo que ralentiza nuestro camino; montar en esas condiciones se hace muy difíciles los continuos cambios de nivel te destroza las manos al soportar en las bajadas el peso del cuerpo sobre ese punto.

Pasadas unas horas sobre el horizonte aparece el desierto negro; como un espejismo se contempla el contorno de una enorme kasbah fortificada, se trata del pueblo Lkmimiya, parece que pararemos pero nada indica que eso pueda suceder, después de media hora más decido bajarme del dromedario pues ya me duele hasta los músculos de los párpados.

Se prepara la tormenta en el desierto del Sahara

Como ya he comentado, caminar por el desierto es lento y nada cómodo y ahora lo estoy comprobando, poco a poco los camellos nos abandonan la visión, a duras penas podemos seguir con los ojos la estela de la expedición. Seguimos el rastro por medio de las huellas e intentamos acortar por las dunas para no quedarnos solos en ese lugar tan inhóspito.

Una hora más andado, hasta que ante nuestros ojos aparece la estela de un oasis, su nombre es Kemkemía, compuesto de un grupo de jaimas más numerosas que las que hemos visitado hasta ahora y una muy grande que hace de comedor.

Estoy extenuado y por un momento pienso en el día siguiente y la capacidad de mi cuerpo para poder afrontarlo, me ofrecen un Ibuprofeno y enseguida noto sus efectos positivos, acompañado de una relajante ducha me hace cambiar radicalmente mi aspecto.

Cuando regreso veo como están picando hielo para enfriar multitud de refrescos y como el anuncio de coca-cola se me cae la baba, en breves instantes tendremos el refrescos más frío del mundo y mientras lo saboreo me hace volver a este planeta llamado tierra.

Los tonos de las dunas cambian según las horas del día

Para cenar nos han preparado un estupendo couscous berebere y naranjas, además nos obsequian con agua embotellada fría.

Después de la cena directamente sin ningún tipo de fiesta pasamos a la colchoneta con varias mantas, como primera impresión me parece una exageración pero con el paso de la noche la temperatura cae tantos grados que no tienes con que taparte. El sueño se apodera sin tener conciencia de donde estoy y que hago allí; a mitad de las noche el viento me despierta y veo como en la jaima entra arena por todos lados, la solución es meterse dentro de la manta y así consigo conciliar nuevamente ensueño, esto de hacer vivac en el desierto tiene estos inconvenientes.

Día 30 de marzo de 2010 (martes)

RUTA: O ASI S KEMKEMÍA-O ASI S MEZZAN-O ASI S BOY D'ARGUI

A las 8 de la mañana comienza el ajetreo de la expedición, no hemos podido levantarnos a las 5,30 para ver el amanecer en el desierto, tampoco hemos disfrutado de las estrellas de la noche, nuestro cansancio se hizo presa de nuestro cuerpo.

Merecido descanso en el desierto del Sahara

El desayuno es sencillo pero copioso con pan berebere, mermeladas, mantequilla , huevos cocidos, aceite de oliva y queso. En el exterior todo esta preparado para un nuevo día, los dromedarios están nerviosos y protestan airadamente cuando aparecen los primeros bártulos, ya saben cual será su destino durante todo el día. Las cuerdas vuelven otra vez de las patas de los dromedarios a sus bocas y esto constituye es el pistoletazo de salida.

El color de la arena es amarillo oro, las figuras que dibujan las dunas sobre el horizonte es totalmente distinto al que ofreció en día anterior, parece que estamos atravesando otro desierto, estamos ante un desierto de “oro” ¡qué bonito es! estremece su contemplación. Nada más salir y sobre el propio dromedario me tomo otra ración de Ibuprofeno pues enseguida noto como mis músculos nuevamente se resienten; con el paso del día el color de la arena tiende a oscurecerse y adquiere un tono ocre. En el viaje con diferencias los que mejor se portan son los niños, unos cabalgan callados y otros han decido que los dromedarios sobran en su vida y deciden ir jugando por las dunas; el retozo es muy sencillo se suben de cualquier modo a lo alto de la duna y se tiran rodando, disfrutan como si estuvieran en la montaña rusa del mejor parque de atracciones del mundo.

!Hemos llegado!

Contrariamente a lo que se pueda pensar el viaje no es nada monótono, el pasaje es cambiante, los tamaños y las formas de las dunas son completamente diferentes, la vegetación es escasa, solamente se contemplan algunos hierbajos y palmeras solitarias.

A primera hora, después de atravesar un mar de dunas llegamos al oasis Taffout, es un lugar de descanso para desentumecer los músculos y sentarse a la sombra de los camellos, nos refrescamos humedeciendo los turbantes en el agua fría de los pozos del desierto.

Nos acercamos hasta un verdadero poblado familiar nómada del desierto, esta ocupado por una sola familia, en estos momentos se encuentra la madre y un pequeño que no tiene más de nueve meses. La mujer nos explica la dureza del desierto, como hace poco el campamento se movía en función de los cambios continuos de las dunas del desierto, ahora, con la mejora del nivel de vida, se han fijado a este lugar gracias al turismo; el marido trabaja en una jaima y ella hace las tareas de la casa, dispone de un rudimentario horno donde diariamente hace el pan y pone el tajine a calentar; enseguida aparecen los dos hijos mayores que no tienen más de 6 años y con su trabajo estos niños ayudan al sostenimiento familiar pastoreando un rebaño de cabras en un pequeño palmeral cercano, que no tendrá más de ocho o nueve palmeras, no van al colegio, no sabrán leer ni escribir, no tendrán médico cercano, su futuro solamente esta en las manos de su trabajo. Nada más vernos, los chiquillos nos presenta sus artículos para vender y montan su pequeño mercadillo. La mujer prepara un te berebere que nos refresca y tonifica el cuerpo. Esta señora es muy joven, lleva cubierto todo el rostro pero deja entrever con unos centímetros de los ojos y nos dice que es una mujer guapa, que ha dado un paso adelante en su futuro para acercarse hacia occidente y dejar a tras su forma de vida nómada. Sobre su espalda se ha colocado a su hijo pequeño para poder trabajar sin necesidad de estar pendiente de la seguridad de niño, es una familia humilde pero sobre los brazos y manos destaca sus joyas doradas. Esta familia no tiene televisión, no sabe lo que es Internet, tampoco conoce la radio, desconoce que hará mañana y más aún que será de su vida el próximo mes. Cada día se levanta cuando amanece, se acuesta cuando anochece, necesita muy poco para vivir, sabe protegerse cuando hace frío, sabe resistir cuando hace calor, sabe buscar agua cuando tiene sed, pero donde mejor se desenvuelve esta gente es en el manejo de los cinco elementos básicos de la tierra: fuego, agua, tierra y el quinto elemento es la quintaesencia, un don invisible y que solamente algunas personas lo perciben, en otras civilizaciones se llamo “eter”.

Esperando que las temperaturas bajen

A la hora de comer llegamos nuevamente al Oasis Mezzan donde estuvimos comiendo ayer. Lo primero que hacen los dromedarios nada más llegar es recibir su recompensa de 15 litros de agua, los pastores se comunican y se dicen unos a otros: ¡ elbil damia! , es decir “el camello necesita abrevar”, cuando terminan de beber se dicen ¡ elbil sharb! es decir han saciado su sed, enseguida los camellos y camelleros se tumban cansados. Entorno al pozo surgen las primeras bromas con el agua y que todos agradecemos nuestra parte del cubo sobre la cabeza.

En el interior de la jaima esta dispuesta la mesa para los comensales, primeramente saboreamos el te caliente que nos tonifica; nos han preparado una especialidad del desierto se llama Kalia, es una variedad del tajine marroquí, con carne de vaca, verduras y huevo duro, el mejor que he probado en Marruecos, estaba especialmente trabadito y muy bien cocinado; todo ello es acompañado de una ensalada y de postre las naranjas de la tierra.

Durante la digestión en lugar de amenizarnos con los sonidos del desierto, los chicos y los pastores han perdido la vergüenza y se entablan una batalla con el agua del pozo, que por cierto, estaba que cortaba el cutis.

Durante el descanso los dromedarios vagan por el desierto sin alejarse mucho de la jaima, buscan unas hierbas que se llaman “ ascaf”, es una planta con mucho contenido en sodio que les produce mucha sed pero en el desierto muchas veces no se puede elegir o pasas sed o te mueres de hambre.

Desierto del Sahara

Cuando el sol ha bajado lo suficiente se produce el reagrupamiento del rebaño que se llama "elbil" . Para poder subir a la silla del dromedario es imprescindible que el animal se baje a nuestro nivel, eso se consigue con una palabra que todos entienden ¡usch! ¡usch! ¡usch!, bueno, no si se escribe así, pero así sonaba, además es imprescindible la caricia de su lomo. La realidad era que la palabra cuanto más seca se pronunciaba era más efectiva, en mi caso nada más verme ya el animal se arrodilla haciéndome una referencia de sumisión, mi dromedario se llama Ashaal por su color castaño, sus patas más claras y su condición de macho castrado, es el animal más grande y poderoso de toda la manada, sus dueños lo castraron para que tuviera una monta mas dócil y no fuera un animal peligroso durante las épocas de celo de las hembras.

Dicen que los dromedarios son rencorosos y son capaces de guardar una venganza a cualquier persona que les haya tratado mal, incluso son capaces de entender un insulto como una agresión verbal, yo sabiendo todo esto procuro tratarle de hombre a dromedario.

Buscando la sombra

Ashaal, mi dromedario esta en la edad madura, dice su propietario que tiene dieciocho años, a esa edad se les denomina “Gared” porque les crece los colmillos afilados con lo que se pueden enfrenar durante las peleas, como el pobre esta castrado no se ha desarrollado tanto esa faceta o bien le han llevado al odontólogo animal para limar esa dentadura tan peligrosa. Cuando los animales son mayores se les llama “A ud” para referirse el macho y “Auda” para la hembra, este es el peor periodo de su vida pues se tumban por la noche y nunca se sabe si serán capaces de levantarse.

De toda la manada hay uno que es el más fotogénico, es totalmente albino su nombre es “Beida” (hace referencia a el color blanco de su pelaje); durante su descanso de la comida he estado jugando con él, he aprovechado para colocarle la bandera española y poder fotografiarle, y el pobre no se ha quejado, espero que durante las próximas 24 horas no me guarde ningún rencor, ¡esto de que sean tan vengativos no me gusta un pelo!.

Me cuentan como son los machos bravos de dromedario, los llaman “leguud”, entran en celo solamente en otoño y preñan a las hembras a partir que cumplan entre tres y cuatro años. La hembra la llaman “Naga” y tiene una gestación de 12 meses, cuando nace el camello bebe, a este le llaman “lehuar”; el periodo en que amantan al hijo es el más productivo para el propietario pues parte de la leche de camella es empleado para consumo humano, el alto precio de 200 euros por un litro de leche justifica económicamente su gestación. La leche de camella es utilizada como un uso terapéutico por los beréberes y por los marroquíes cuando sufren graves dolencias estomacales o del intestino, después de la ingesta, producen un estado depurativo en los pacientes, eliminando todo tipo de bacterias, larvas o parásitos del agua (amebiasis).

Llamada a la huelga

Nada más sentarte en la silla del dromedario instintivamente se levanta, no escucho nunca la palabra contraria a ¡usch! (bajar) o por lo menos no la recuerdo.

No era la primera vez que había montado en camello, la primera experiencia fue en Túnez, y la verdad dure muy poco en sus lomos, de ahí mi preocupación por esta experiencia en el desierto, pero ya han pasado las primeras 24 horas, creo que son las peores, cierro los ojos y ahora me toca disfrutar a mi, bien es verdad que he tenido ayuda del Ibuprofeno y también mi relación con la joraba de animal es mucho mejor que al principio de conocernos. Quizás el secreto es dividir el peso de tu cuerpo imaginariamente sobre el espacio entre joroba y joroba, tratando de levitar de alguna forma durante los descensos del terreno en que se produce una inclinación natural sobre la cabeza del animal, por un momento recuerdo la posición de los vaqueros de Texas durante el rodeo, me echo para atrás y consigo una posición de equilibrio, para compensar el peso de mi cuerpo me sujeto a una cuerda que todos dromedarios llevan en su extremo y sirve para sujetar la montura al rabo. ¡Vaya éxito! ahora que me he acostumbrado hemos sobrepasado el ecuador del viaje por el desierto.

Orgulloso de su patria

Pronto notamos que la expedición no funciona, algo va mal, uno de los dromedarios no deja de berrear, este grito lo llaman los beréberes“ lehdir”, se trata de uno de los sonidos característicos del desierto. Llevamos una hora de marcha y el dromedario no para de ¡lenhdir! y nos preguntamos ¿qué le sucede”, durante el camino vamos haciendo nuestras conjeturas, ¿esta en celo?, ¿tiene alguna dolencia?, el pastor que conduce la caravana ríe y ríe y nos explica cual es su dolencia, le han quitado al dromedario que siempre va delante porque estaba agotado y lo han dejado en la anterior haima para formar parte de otra expedición, durante los siguientes 60 minutos el dromedario sigue quejándose y berreando como un cosaco, le hago una cura psicológica explicándole cual es su verdadero problema, hasta que súbitamente se calla, en ese momento asimila que su numero y papel en la caravana ha cambiado y que su amigo vendrá pronto para estar juntos por los siglos de los siglos, esto es efectivo, nunca más durante el viaje volverá a lenhdir.

Una vez conseguido que mi cuerpo se adapte al terreno, ahora que camello y jinete somos uno, las siguientes horas me quedo callado intentando “Mirar el desierto”, el paisaje ejerce en mí un poder de fascinación, estoy ante un espacio gigantesco inabarcable para un humano, cualquier lado hacia el que dirija mi mirada tiene una diferencia singular: la sombra de Ashaal (mi dromedario) , una hierba aislada, una palmera solitaria, una huella de una serpiente, otra de un escarabajo pelotero, otra más de un ratón del desierto, otras muchas de camellos que las están borrando el viento, otras tantas huellas de personas que forzosamente se las llevará el tiempo.

Espejismo en el desierto del Sahara

El calor todavía agita con fuerza sobre el terreno, lo que es conocido entre los nómadas como “ tlu smallem” se trata de unas constelaciones que se ven en el firmamento indicando el peor momento de calor y que son más expresivas durante la época estival en que las temperaturas llegan a marcar los 52º C., es el momento en que las dunas se vuelven ocres y sus cimas se confunden con el sol.

Atravesamos los restos de un mar salado, el color ocre ha cambiado por el gris y aparece el blanco de la sal, en cuyos suelos se han instalado numerosos grupos de haimas, al fondo aparece el semblante de la gran duna, en el horizonte destacan un trío de palmeras que sobre su regazo florecen un buen numero de adelfas moradas, es el mejor toque de color del desierto después del azul y el amarillo de la vestimenta de nuestros guías.

Enseguida llegamos a nuestro ultimo punto del día se trata del Oasis Boy D'Argu, esta levantado sobre un pedregal, —esto lo podremos comprobar mas duramente durante la noche— esta formado por seis tiendas o habitaciones y una más grande que sirve de cocina; se encuentra situada bajo la sobra de la Gran Duna de Erg Chebbi cuyo nombre significa “pequeño”, pequeños nos sentimos nosotros ante la mayor duna de todo Marruecos, tiene una altura de más de 200 metros y unas arenas que cambian de color durante el día, simplemente la sosegada contemplación constituye un verdadero espectáculo natural.

Gran duna Erg Chebbi

Una parte importante del grupo, sobre todo los niños, deciden la ascensión a la Gran Duna, no exenta de dificultad, aseguran, que desde su cima se tiene una visión de Hassi Labied, en días claros puede llegar hasta Argelia.

La cena se sirve en el centro de la jaimas sobre unas mesas bajas, aprovechando unas mullidas alfombras con colchonetas, nos disponemos a saborear un estofado de tagine berebere a la usanza del desierto, ósea con la mano derecha, ya sabemos para qué sirve la mano izquierda. Con la ausencia del cubierto solamente tenemos para empujar la comida una montaña de pan marroquí, doy cuenta del plato en buena compañía, el pollo lo dejamos en la bandeja y solamente comemos de la parte vegetal.

La luna se apodera del campamento y sirve de compañía a los camellos que se encuentran tumbados a nuestro lado, la gran duna se dibuja en el horizonte gracias a una noche clara, el cielo se encuentra estrellado y completa el escenario idílico. Mirando detenidamente el cielo es fácil encontrar la Vía Láctea, primero encuentro la Osa Mayor o también conocida como la constelación del Gran Carro y después uno las estrellas del final del Carro hacia su lado más abierto y encuentro la estrella Polar.

Descanso bajo la luna en el desierto del Sahara

Si las jaimas estuvieran calificadas por estrellas como los hoteles españoles, la de ayer estaría en las *** y la de hoy sería una pensión de la Plaza de España de Madrid (P), sería humilde, llena de atractivos, pero lo que más destacaría sería su situación del centro geográfico.

Antes de marchar a la cama o mejor dicho al suelo, nuestros amigos intentan hacernos una proposición indecente para que nos quedemos durante todo el día de mañana y podamos hacer otro repaso al desierto, la oferta es suficiente tentadora pero después de evaluar el trastorno en el general del viaje decidimos no aceptarla.

Ya no recuerdo si me tome otro Ibuprofeno pero me siento totalmente en forma: Tomamos posesiones de nuestra parte proporcional de jaima, las mantas que utilizamos para aislarnos del pedregal son las heredadas de las monturas de los camellos con un cierto olor a matarratas. Los colchones son tan finos que mejor estaríamos durmiendo sobre la arena de la duna pero a ver quién es el guapo que se atreve.

A las dos de la madrugada mis músculos se agarrotan e impiden mantenerme por más tiempo en posición horizontal, salgo de la jaima para estirar las piernas. El espectáculo es excepcional parece que estoy sumergido en una película de sombras chinescas, el color del desierto ha pasado a ser pintado en blanco y negro, blanco puro de la luna y el negro de las sombras. A nuestro lado los sonidos son los ronquidos tanto de personas como animales que se mezcla con el sonido del viento en el desierto.

Día 31 de marzo de 2010 (miércoles)

RUTA: OASIS BOY D' ARGU-HASSI LABIED- RASSINI- TINEHIR

Amanecer en el desierto del Sahara

A las 5,40 nos avisan de la proximidad del amanecer, me levanto para vivir otro de los espectáculos del desierto, sobre todas las lomas se ve gente contemplando la misma escena que nosotros, el sol se levanta con fuerza, con toda la intensidad que puede para la época del año, la escena no dura más de 5 minutos, es tan breve que sin darnos cuenta el día ha comenzado con toda su intensidad.

Después del desayuno berebere nos montamos apresuradamente en un camello que no es el mío no esta mi Ashaal, al grito de ¡hay prisa! ¡hay prisa! salimos los seis primeros camellos disparados entre las dunas, vamos tan deprisa que la forma de montar a mi antiguo camello no sirve para este, pues cuando lo intento parece que estoy en un verdadero rodeo americano, la joroba de este animal es mucho más pronunciada lo que ayudará para que mi culo le salga una enorme escara como la de un anciano encamado.

Preguntamos al guía que incendio se ha producido y nos contesta que no quiera hablar, esta cansado, tiene hambre, le decimos que en Marruecos las prisas matan, no existen y nos dice que hoy si. Según pasa el día nuestro amigo se va calmando y comienza a espetar por su boca, es el mayor de los hermanos y su padre le ha llamado por la noche porque habían llegado unos turistas, había tenido que volver a las dos de la mañana al pueblo a por los turistas y los ha llevado durante todo la noche hasta sus jaimas en mitad del desierto y después regreso a por nosotros. Solamente repetía tengo hambre, sed y estoy cansado, tengo hambre, sed y estoy cansado.

Dromedarios en el desierto del Sahara

Le hago ver la cita del Corán presta atención a los camellos en:

“Alá crió los camellos para que os abriguéis con vestidos de sus lanas y de su carne comáis. Ellos os regresaran a casa al anochecer y llevan vuestras cargas a países lejanos, donde vosotros solos no podríais llevar”.

Haciendo caso a Mahoma, doy gracias que no hemos tenido ningún incidente digno de reseñar durante toda la travesía por el desierto. Después de varias horas a lomos de un camello llegamos al pueblo de Hassi Labied, la panorámica es magnifica el gris se abre paso al fondo delante de las montañas del Gran Atlas.

Nuestro kasar es el último de la calle principal del pueblo, cuando llegamos nos están esperando toda la chiquillería para intentar que les demos una limosna pero estos niños no necesitan caridad pues su ropaje les delata, lo que necesitan simplemente es un futuro mejor.

Lo siguiente es ducharnos lo más ordenadamente posible pues solamente tenemos a nuestra disposición dos duchas y enseguida vemos que esto es imposible, nos habilitan otras duchas de habitaciones según se van quedado libre. Este es para mi el momento más delicado del viaje, quiero quitarme toda la mugre acumulada mediante una ducha reparadora, me restriego con la parte más áspera de la esponja y cuando llego a mis posaderas veo las estrellas ¡guao la osa mayor y menor! ¿Cómo debo tener mi culo? me pregunto. Ahí no queda la cosa, pues me aplico en la zona (no lo repito para no dañaros) la famosa pomada llamada “Natusan” y las lágrimas del dolor aparecen por mis ojos, las mismas que mi dromedario tenia al verme; ahora comprendí como lloraban mis hijos cuando eran pequeños y les aplicaba esa misma pomada.

Entrada Hassi Labied

Pronto toda la expedición estamos todos listos para emprender nuestro viaje, después de dejar todo pagado nos marchamos por el mismo camino de la llegada al pueblo.

Acabamos de dejar una de las zonas geográficas que para los marroquíes sería el “Erg” corresponde con la zona que se definió como la franja de arenas o desierto. El siguiente paso en el viaje es recorrer una de las rutas más bonitas, es conocida con el nombre de “Las Mil kasbachs”, abarca desde Rissani hasta Ouarzazate, para hacerlo con mayor seguridad hemos contratado el servicios de un guía Hassan/Vicente –en realidad se llama Hassan pero de pequeño un español que llego al pueblo le llamo Vicente y por ese nombre es conocido– que nos acompañara con la intención ayudarnos a descubrir los secretos de la ruta entre Hassi Labied y Tinerhir.

Son las 12 de la mañana cuando abandonamos el pueblo sin poder conocer la familia Ouala que nos ha servido de anfitriones, la verdad que con solamente escuchar la recomendación de acudir a una tienda nos hace pensar que esto significará una perdida de tiempo muy importante.

Enseguida salimos del pueblo y el Tom Tom sigue sin conocer la carretera que nos conduce hasta la ciudad de Rissani. Se trata de una ciudad que sirve de centro administrativo y comercial para todas las zonas próximas.

Las gasolineras son escasas por estas latitudes, decidimos llenar los vehículos antes de que lleguen a la mitad de los depósitos, y lo hacemos en Rissani, cuyas coordenadas GPS son: N 31º08'08''; W 4º01'21'' , como no tienen pago con tarjeta Visa. solamente aceptan “cash”, pero si tiene una oficina de cambio muy favorable 1€ por 10 Dh. (claro para ellos).

Entrada al Mausoleo  de Moulay Ali Cherif

Directamente nos vamos hacia las afueras y a 2 Km. esta el Mausoleo  de Moulay Ali Cherif o Sheriff; aparcamos en las proximidades en el parking cuyas coordenadas corresponden con N 31º16'45'' ; W 4º15'13'' .

Moulay Ali Cherif fue el fundador de la dinastía alauita, que continúa reinando hasta hoy en Marruecos. Fue reconstruido en 1.955, después del desbordamiento del río Ziz y que destruyera buena parte del edificio original, se rehabilito y ahora se permite la visita a los no musulmanes.

Accedemos al edificio por un portal que conduce a unas galerías a modo de claustro con una fuente en el centro del gran patio central. Las galerías tienen un solado cerámico de estilo hispano-morisco, hace juego con el zócalo que tiene bonitos encadenados en azul y blanco, muy parecidos a los patios del Alcazar de Sevilla. Los marcos de las ventas y de los zócalos se decoran con finas yeserías. Los arcos de las galerías son apuntados en herradura, las puertas son de madera de cedro policromado con tintes naturales formando bonitos dibujos. Sobre las bóvedas cuelgan finas lámparas de bronce talladas al modo marroquí.

En un lateral se encuentra la puerta de entrada a la mezquita, el maxura, esta decorado con azulejería, los fustes de las columnas son cuadrados y sujetan amplios arcos de herradura apuntados –muy parecidos a la mezquita de Taza–, al fondo, y mirando a la Meca se encuentra el mihrad, es sencillo esta decorado con azulejos vidriados y estucos con relieves. Sobre las paredes destacan las yeserías con inscripciones del Corán y lucernarias con vivos colores que sirven de linternas para iluminar el maksura.

Puertas de cedro Mausoleo  de Moulay Ali Cherif

Atravesando uno de los patios llegamos a la zaouia donde se encuentra el Mausoleo  de Moulay Ali Cherif, la sala es muy parecida a la mezquita pero con columnas más pequeñas recubiertas de azulejería mudéjar andaluz, los arcos son apuntados decorados con una yesería de cortina invertida.

Delante del mausoleo hay una gran plaza en la que se celebran los mercados de los domingos. Hasta aquí llegan los comerciantes de distintas tribus del desierto con sus turbantes y túnicas, traen aquí sus mercancías y artesanías para vender.

Detrás del Mausoleo se encuentra la Kasbah real, también conocido como ksar d´Akbar, en su día sirvió para albergar a los miembros desgraciados (enfermos) de la familia alauita y a las viudas y concubinas de sus miembros principales. Ahora esta ocupado por tres familias y una parte esta dedicada a la sede de la Asociación Moulay Ali Cherif, se trata de una ONG cuyos fines se dedican al cuidado y el amparo de las viudas beréberes.

La viudedad forma parte de una de las injusticias sociales que se produce con mucha frecuencia en Marruecos, el Corán (teóricamente) coloca a la mujer en el mismo plano de igualdad con el hombre:

Kasar Real en Rissani

“Alá ha preparado perdón y magnífica recompensa para los musulmanes y las musulmanas, los creyentes y las creyentes, los devotos y las devotas, los sinceros y las sinceras, los pacientes y las pacientes, los humildes y las humildes, los que y las que dan limosna, los que y las que ayunan, los castos y las castas, los que y las que recuerdan mucho a Alá".

Al morir el marido, sobre todo si la vida es en el desierto, la mujer tiene que abandonar sus propiedades porque es incapaz de llevar una vida familiar ante las adversidades del medio donde habitan. La mujer, si puede, regresa a la ciudad para esperar el ofrecimiento de un hombre mayor y poder contraer matrimonio en segundas nupcias, o por el contrario, la espera la humillación de la sociedad por medio de la prostitución o la caridad realizando la mendicidad.

El ksar Real esta construido en adobe con una arquitectura defensiva, la portada principal de tres arcos apuntados en herradura y encalados en blanco, el central mucho mayor que los colaterales. Las calles constituyen un entramado de túneles y arcos que apenas dejan pasar la luz dotando a las viviendas del frescor necesario para combatir los rigores del verano, por el centro de las calles hay un reguero que servia para evacuar las aguas de las casas.

Restaurante Tombouctou

Continuamos nuestro viaje en dirección a las Gargantas del Todra y enseguida se nos echa encima la hora de la comida, estamos atravesando el paisaje que ellos llaman “Reg” se trata de la parte del desierto pedregoso. Los relieves rocosos son atacados por la meteorización, el suelo pierde la arena por la falta de agua y el viento termina por trasladar las partículas más finas hacia el desierto o “Erg”.

Este paisaje es interrumpido con la aparición de pequeños palmerales que nos son imposibles llegar, están unidos a la carretera general por pistas no transitables para nuestros enormes vehículos.

Los kilómetros pasan y el tiempo también sin la aparición de un sitio adecuado para hacer un alto en el camino y poder comer a la sombra. Atravesamos el pueblo de Msissi y a la salida milagrosamente –como casi siempre sucede en Marruecos– aparece el Restaurante Tombouctu, las coordenadas del lugar corresponden con N 31º13'00''; W 4º49'18''. Le indico a Hassan que baje y pregunte si nos dejan comer en su interior nuestro propio almuerzo, dicho y hecho. Así era España hace unos años cuando se podía comer en cualquier restaurante de carretera solamente consumiendo la bebida del establecimiento, aún me acuerdo de la Revoltosa y el vino.

Enseguida organizamos la operación kilo, cada familia aporta lo que “kilotiene” o “kilopuede”. El importe que pagamos por el alquiler de las mesas y las pocas bebidas consumidas asciende a 220 Dh.

Continuamos el camino hacia Tinerhir, el paisaje es una maravilla, totalmente desértico con algunos pequeños árboles espinosos de Argan que se desarrollan en zonas áridas y rompen con la monotonía tan desoladora, pequeños rebaños de cabras y alguno de dromedarios, la carretera es muy correcta. Algo me dice que no vamos bien porque en ninguno de los hitos o mojones que hemos pasado he visto la ciudad de destino, si aparece Zagora y Ouarzazate, varias veces se lo hago saber a nuestro guía pero según me indica vamos por buen camino. Cuando llevamos más de 220 Km. y la luz empieza apagarse, ya me planto, al llegar a la ciudad de Tazzarine y le digo al guía que pregunte, parece ser no hemos transitado por la carretera correcta y estamos en la N-12, la solución es volver 70 Km. y coger una pista hasta Tinerhir, la experiencia de viajar de noche por Marruecos nos hace reconducir el viaje, damos por imposible el poder hacer la ruta de las mil kasbah y las Gargantas del Todrá. Por el contrario haremos el tramo hasta Ouarzazate por la N-12 y luego por la R-108, no tenemos referencia de este tramo pero seguro que habrá lugares de interés en la ruta de mañana.

Villa Turística Bougafer, Tazzarine

Ahora lo que más nos preocupa es donde pasar la noche en Tazzarine, estamos en una ciudad entre la nada. A la salida hay un hotel de lujo donde nos dirigimos para pernoctar en su parking, se trata de la Villa Turística Bougafer cuyas coordenadas corresponden con N 30º46'39''; W 5º34'07'', sacados de atolladero en que nos encontrábamos, le despido a nuestro guía y nos vamos a ver que ofrece este pequeño pueblo a un grupo despistado de viajeros.

Visitamos la mezquita, la decoración es muy sencilla, simples arcos apuntados en el maxura, las paredes totalmente encaladas sin ningún tipo de decoración, en los suelos mullidas alfombras forman una improvisada moqueta. Nos sentimos protagonistas por las miradas de la gente del pueblo. Intentamos comer lo que nos ofrece el pueblo pero las chicas prefieren cenar en nuestros propios fogones.

Día 1 de abril de 2010 (jueves)

RUTA: TAZZARINE-NEKOG-OUARZAZATE

El almuecín me despierta cuando hace el llamamiento a la oración desde la torre de la mezquita, estoy intranquilo y me levanto para ver la ciudad. Tazzarine se encuentra totalmente deshabitada, ni tan siquiera los coches circulan por las calles. Un gran monumento con forma de libro que me imagino hace referencia al Corán abre las puertas de la ciudad. Es una ciudad polvorienta, aunque en estos momentos el cielo es limpio, sobre el suelo hay restos de una noria, la construcción de las casas se alternan entre las levantadas en adobe y las de nueva generación en cemento, sin ninguna continuidad, al fondo destaca el contorno de un morabito, pronto me doy cuenta que estoy sobre el cementerio del pueblo, es un descampado con simples piedras que como hitos me indica que es un sitio santo, no hay sepulturas son simples piedras desordenadas, unas de pie, otras tumbadas. Las mujeres tienen dos piedras, una en la cabeza y otra en los pies y los hombres solamente una. No hay flores, no hay sentimiento de grandezas, solamente son piedras.

Cementerio de Tazzarine

Recuerdo haber leído el rito funerario islamista y enseguida pienso en ello. Primero se baña al difunto siguiendo los rituales del Islam, lo tiene que hacer una persona del mismo sexo, una persona cercana y ser conocedor de las reglas fúnebres: “ Quién bañe a un difunto y guarde sus secretos, Dios le perdonará y bendecirá”. Luego se amortaja al difunto con tres paños blancos si es hombre y con cinco si es mujer. Los musulmanes no necesitan féretros, no necesitan más tierra que la que abulta el contorno del cuerpo, no es necesario hacer un bosque de tumbas monumentales, solamente como elementos: un hoyo, tierra y piedras para señalizarlo.

Morabito de Tazzarine

Enseguida se me acerca un hombre que llamado por la curiosidad me dice que ha vivido en España y que me da la bienvenida a su pueblo, me da las gracias por las fotografías que estoy tomando, que mostraré a mi regreso.

La arquitectura tradicional es magnifica aunque mal conservadas, en las inmediaciones hay gran numero de grutas o casas trogloditas que son utilizadas como amortiguación del clima por los beréberes sedentarios, el palmeral ocupa una buena parte del paisaje y es el oasis es el punto que da vida al pueblo. Cerca hay otro pequeño morabito mucho más sencillo que el anterior con un cementerio mucho más sencillo y antiguo. Los obreros de la construcción trabajan sobre pequeñas casas utilizando materiales derivados del cemento como cualquier pequeña casa en España.

El sol ya esta a una altura considerable por lo que imagino que los integrantes de la expedición se abran levantado para continuar el viaje, cuando llego al parking del hotel solamente nos queda pagar y seguir viaje.

Arquitectura de Tazzarine

La primera parada es en la ciudad de Nekob o N'koob, desde la lejanía ya nos descubre que estamos ante una de las ciudades más bonitas de la región, su arquitectura esta compuesta por más de cuarenta y cinco Kasbah y unas vistas impresionantes sobre el palmeral y las montañas Saghrou , todas edificaciones han sido construidas con los materiales tradicionales de adobe, algunas con más de un siglo de antigüedad. Fue fundada en 1870 por una de las tribus beréberes Ait Atá que querían pasar de la vida nómada a una vida más estable.

Nuestro primer destino es la Kasbah Baha Baha, las coordenadas del parking son N 30º52'38,02''; W 5º51'54,92'' . En su interior se halla un pequeño museo etnológico de la región con reproducciones de las ceremonias de la tribu fundadora. En estos momentos hay un congreso o reunión y no podemos ver su interior.

Le pido a los muchachos del pueblo que nos conduzcan a otra Kasbah parecida y que pueda ser visitada, después de zigzaguear por las calles del pueblo nos presentan la Kasbah Imdoukal, se trata de un recinto antiguo rehabilitado totalmente y convertido en la actualidad en un precioso hotel, su dueño nos enseña las habitaciones y sobre todo su terraza desde donde podemos ver una impresionante panorámica sobre el palmeral y las montañas. Después de tomar el té caliente y zumos de naranja nos marchamos.

Kasbah en Nekob

Los siguientes kilómetros son tortuosos la carretera esta asfaltada una sola dirección teniendo que parar completamente cada vez que nos cruzamos con un vehículo, por el riesgo grave de proyecciones, todos los vehículos circulamos con precaución excepto los 4x4, sobre todo los de alquiler y muchas matriculas españolas que entiende que circular por estas carreteras es un juego y su vehículo tiene inmunidad; para complicar más la cosas hay tramos en obras con desvíos constantes por pistas polvorientas, para dar más emoción los 4x4 ponen en peligro nuestra integridad cada vez que nos adelantan o nos cruzan, el camino se convierte en una pesadilla porque los tramos en obras son casi 40 Km. tardamos casi dos horas en recorrerlos. Estamos atravesando el relieve del desierto llamado “reg” en el suelo las piedras son planas y las montañas están muy erosionadas por el efecto del viento, de vez en cuando el paisaje es alterado con pequeños oasis compuestos por una o dos Kabahs, la vegetación es de unas decenas de palmeras, las retamas y algunas pequeñas plantaciones componen el paisaje.

Con el abandono de la carretera R 108 nos incorporamos al Valle del Dráa dibujado con la presencia del río del mismo nombre, la vida se apodera nuevamente del paisaje sobretodo la parte de la ribera y unos cientos metros mas a ambos lados, constituyen una autopista de verdor.

Paisaje llamado "reg", Marruecos

Continuamos entre el Valle y a unos 60 Km. antes de llegar a Ouarzazate atravesamos una bonita localidad se trata de Agdz, desde la carretera aparece la silueta de una pequeña mezquita y en ambos lados se adornan los perfiles de las kasbah, es una de las localidades de paso en las caravanas que conducían desde el desierto a la ciudad, lamentablemente no tenemos tiempo para parar y dar una vuelta.

Los siguientes kilómetros los hacemos por el Anti Atlas es un tipo de paisaje es llamado “Hamada” o “Hammada” es una zona caracterizada por las grandes piedras despojadas de vegetación, las montañas describen perfectamente las cotas de nivel como si de un mapa topográfico se tratase.

En seguida llegamos a la ciudad de Ouarzazate, era una pequeña ciudad compuesta por un conjunto de aldeas fortificadas, bajo el dominio francés fue declarada como la base administrativa y militar de toda la región.

Nos acercamos a visitar la kasbah de Taourirt, situada en las afueras de la ciudad de Ouarzazate, como es la hora de la comida paramos en un parking cercano que nos ofrece un poco de sombra, las coordenadas del lugar son N 30º55'13''; W 6º54'07'' .

La visita a la Kasbah Taourirt se puede hacer gratuitamente por cualquier puerta del recinto pero si quieres ver el interior del palacio es necesario hacerlo por su entrada principal (horario de 8 a 18 horas y el precio 10 Dh.). Una vez allí contratamos los servios de un guía turístico que nos enseñará el interior de la zona más noble. Esta declarada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Kasbah Taourirt, Ouarzazate

La kasbah fue construida en el siglo XVIII, aunque la mayor parte de la estructura fue levantada en el siglo XX por orden de Hamadi EL Glaoui, hermano del pachá de Marrakech, también conocido como el señor del Atlas.

Artesonado de la Kasbah Taourirt, Ouarzazate

Es una fortaleza en abobe que en su interior alberga el antiguo ksar de Taourirt, el Palacio tiene sucesivas almenas unidas con una exquisita decoración en la fachada, donde las imágenes rinden tributo a la estrella del Islam y también se representan el “Menoráh” candelabro judío (la judería vivía su mayor esplendor en la zona). Un amplio patio nos conduce a la escalera de acceso a las habitaciones del palacio, el grosor de las paredes son descomunales para impedir el paso de las inclemencias del tiempo, y también para proteger de los vientos arenosos del sur y gélidos del norte . En la parte de abajo se guardaba el grano y el ganado, mientras que las habitaciones superiores estaban destinadas a los dueños del palacio. Un pozo de luz sirve como linterna y divide todas las estancias para dotarlas de luz natural: La sala de presentación de credenciales destaca por su entramado de cedro policromado en el techo que además se encuentra complementado con un nivel de estucos también policromados con formas de ventanales moriscos; dispone de una pequeña mezquita donde el mexuar esta construido con columnas de fábrica sobre arcos de herradura apuntados, los techos de las zonas que no son nobles y de paso están construido con vigas de palmeras cortadas y el entramado del techo es de hojas de palmeras secas entrelazadas, parecidas al mimbre. La habitación para la favorita (madre del primer hijo del pachá), es la más bonita y decorada de todo el palacio, el techo con un bonito artesonado policromado en cedro y una hilera de figuras estucadas policromadas, una gran balconada dirigida al patio central y sobre las pequeñas ventanas decoradas con forma de hornacinas policromadas. La habitación principal es la más grande del palacio tiene orientación a los cuatro puntos cardinales con tres ventanales por pared y una bonita rejería, en sus paredes esta decoradas con yeserías con pequeñas citas del Corán. Un pasillo de salida nos permite contemplar la impresionante panorámica de los estudios Universal donde se alzan las figuras de una torre musulmana y la cúpula de una iglesia de cartón-católica.

Mezquita de la Kasbah Taourirt, Ouarzazate

Abandonamos el palacio para internarnos en la kasbah, es como regresar en el túnel del tiempo cuatro siglos atrás. El adobe es el único material de construcción en las paredes, los techos son de madera de palmera seccionados. Las calles carecen de aceras y el suelo es de tierra. Desde el horizonte destaca la torre de la mezquita de nueva construcción y se diferencia de la kasbah por el uso de fábrica de piedra caliza mezclado con paramentos de mortero de cal.

El guía se empeña que visitemos la mejor tienda de alfombras de la región, pero nada más subir nos damos cuenta que estamos ante una nueva encerrona y que lo único que sacaremos es la cabeza caliente y los pies fríos, nos negamos y abandonamos ordenadamente la tienda.

Nos dirigimos directamente a los estudios Universal, llegamos 20 minutos antes del cierre y no nos dejan entrar. Nos marchamos directamente para ver la alternativa de los Estudios Atlas Corporation, aunque en la guía indicaba que el horario era hasta las 20,00h pero cuando llegamos esta totalmente cerrado, las coordenadas del parking es N 30º56'25.80'' ; W 6º58'00.00'' , en principio pesábamos pernoctar aquí para continuar viaje mañana.

Nos marchamos para pernoctar al camping municipal de Ouarzazate y pasar allí la noche, las coordenadas GPS son N 30.922949 ; W 6.886727. Desde aquí tomamos dos pequeños mini-taxi hasta la plaza mayor o Al Mouahidine, llegamos con la intención de darnos un baño de shopping y cenar de lo que nos ofrece la tierra. El taxista nos engaña y nos cobra 22 Dh cuando la vuelta nos cuesta la mitad pero esto es lo que hay cada vez que llegas a una nueva ciudad. Las tiendas se encuentran situadas alrededor de la plaza en lo que llaman el zoco de los artesanos, destacan por la cantidad de artesanías beréberes y amuletos de las tribus tribales que ofrecen. La plaza mayor esta abarrotada de gente pero no tiene el atractivo de otras ciudades, en uno de los restaurantes sin mucha pomposidad cenamos, lo único que mencionar lo agradable del lugar.

Día 2 de abril de 2010 (viernes)

RUTA: OUARZAZATE-MARRAKECH 204 KM

Estudios Atlas Corporation en Ouarzazate

Por la mañana antes de salir de la ciudad nos acercamos a los estudios Atlas Corporation Studios. La primera visitada guiada es a las 9,30 nos hacen un lío con los tickets de entrada, el guardia de seguridad impide a los niños sin ticket puedan entrar, cuando queremos remediar el tema el guía se marcha sin nosotros y nos indican que tenemos que esperar hasta las 11,00 horas para la siguiente visita guiada, como nos parece una tomadura de pelo, nos marchamos a la competencia para hacernos una idea de lo que supuso esta actividad en la ciudad.

Enseguida estamos en el parking situado enfrente de la alcazaba o Kasbah Taourirt de los estudios Universal o Museo del Cine, cuyas coordenadas corresponde con N 30º55'15.36'' ; W6º53'58.31'' .

La entrada a los estudios son 30 Dh. un guía que solamente habla francés nos acompañará por todo el recorrido. Estamos en una ciudad de Oscar probablemente es la ciudad del mundo que ha conseguido más la estatuilla de todo Holywood o también es conocida como la ciudad de cine, en julio del 2007, se inauguró el Museo del cine, símbolo de la ciudad, cuya belleza y suntuosidad también puede ofrecer un interesante decorado natural a cualquier cineasta. A Scott le sirvió como escenografía para el rodaje de alguna secuencia de Gladiador, Cleopatra, La pasión de Cristo. Jesús en la sombra del Señor," Pablo de Tarso "," Judas y Jesús, Asterix.

Museo del cine en Ouarzazate

Durante la visita, viajamos a través del tiempo y el espacio y nos sentimos como haber regresado 3000 años atrás, ya que estará rodeado por dos gigantescas estatuas de los faraones, justo después de varios palanquines del antiguo Egipto, que a menudo se encuentra presente en películas como "El Niño de Belén", "Apocalipsis" o "José".

Partimos camino de una de las Kasbah más bonitas de Marruecos, se encuentra cerca de Ouarzazate, nos separan solo 33 Km.. Para llegar tenemos que abandonar la carretera nacional e incorporarnos a una pista parcialmente asfaltada que nos vuelve a complicar la seguridad debido a los dichosos 4x4 que se creen los amos del país.

Llegamos al parking de la Kasbah Ait Benhaddou, ciudad de barro, la situación del parking corresponde con las coordenadas GPS es N 31º02'33''; W7º07'45'', el precio del vigilante 10 Dh.

Enseguida nos acecha un guía que habla español se presenta como Alí, aunque luego nos confiesa que su verdadero nombre es Abdou, el precio que nos pide por el recorrido es de 100 Dh. Al principio, más que el típico guía nos parece un charlatán pero poco a poco se va ganando nuestra confianza y abandonamos las reticencias que siempre tenemos con los guías locales.

Alí, el mejor guía turistico de Ait Benhaddou

Hasta ahora siempre hemos encontrado entre las montañas del Atlas y el desierto muchos tipos de kasbah, todas ellas en color rojizo y formando pequeñas aldeas o asentamientos, desde tiempo inmemorial la etnia bereber, siempre ha aprovechado la riqueza del agua procedente de las montañas que crean los palmerales, de esta forma, aseguran la supervivencia económica de una economía de subsistencia, pero aquí estamos ante la kasbah más bonita de todo la región y que es reconocida en 1987 su protección como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

La kasbah es una ciudad fortificada hecha de adobe y piedra rodeada por murallas con monumentales puertas y torres almenadas.

Ait Benhaddou es un complejo de viviendas unifamiliares independientes unificadas para convertirse en pueblo y asegurarse la defensa y la protección. El pueblo berebere ha sido siempre tribal con numerosos clanes; la importancia de los pueblos fortificados era la defensa de la cosecha de las huertas y de los palmerales.

Ait Benhaddou, Marruecos

Para llegar hasta sus puertas es necesario salvar las aguas frías que bajan desde las montañas, unos optan por mojarse los pies, y otros, entre los que me encuentro, prefiero un viaje en burro hasta la otra orilla (precio 10 Dh i/v). Después de las risas de la situación nos damos cuenta de la verdadera entidad del conjunto que contemplan nuestros ojos.

Ali, nos cuenta como esta kasbah ha sido inmortalizada en el cine con magnificas películas como: Alejandro Magno, Lawrence de Arabia, La Momia, Gladiator, La última tentación de Cristo o Jesús de Nazaret. Nos hace su propia representación como un extra de alguna de esas películas, nos atrapa, confiesa que tiene 17 años, en el cerebro, y 82 en su cuerpo.

El interior de la ciudad verdaderamente nos sorprende, si cambiásemos el color ocre de Marruecos por el blanco diríamos que estamos en un pueblo de Castilla, lo único que les diferencia es la mezcla para construir el abobe que aquí es mucho más frágil. Las siluetas de las fachadas son completamente diferentes no hay ninguna uniformidad, se mezclan partes construidas de piedra, otras con cañas y maderas. Pese a lo inconsistente del conjunto destacan las decoraciones sobre las fachadas que describen su pasado comerciante y artesanos. Sobre la parte más alta se encuentra las murallas fortificadas de la parte más antigua que obedece al antiguo castillo.

Ait Benhaddou, Marruecos

De regreso tenemos que volver a cruzar las aguas heladas del Atlas, como mi billete era de ida y vuelta me sale completamente gratis, eso si tengo que aguantar la risas hasta de Alí, ahora me ha tocado un pollino que están bajito que término por mojarme los pies.

Continuamos nuestro viaje hacia la cordillera del Atlas por el paso de Tizi'n Tichka, con sus 2260 metros es un mítico puerto de montaña, temido por todos los automovilistas marroquíes. La verdad que es largo y pesado pero con cuidado lo pasamos sin ninguna dificultad.

La noche se nos echa encima cuando llegamos a la ciudad de Marrakech, acercarnos unidos la expedición hasta el centro del ciudad se convierte en un suplicio, pasito a pasito nos parecemos la huella de la procesionaria. Nuestra primera intención es de pernoctar en el parking de Koutoubia, cuyas coordenadas N 31º37'25.8'' ; W 7º59'37.2'' . En el momento que llegamos es viernes de rezo y esta toda la zona colapsada por la afluencia a la mezquita más importante de la ciudad. Nos resulta imposible dejar el vehículo en el parking vigilado, nos dicen que a las 22,00 horas, habrá sitio para todos, ante esto decido ir andando hasta el otro parking céntrico que conozco situado a 500 metros de la plaza y corresponde N 31.62024 ; W 7.98737 , nos asegura que en 20 minutos tendrá plaza libres para todos. Después de desplazarnos y ver que no se ha marchado nadie, decidimos cambiar los planes y dirigirnos hasta el camping de Marrakech Ferdous, situado a unos 10 Km. del centro de la ciudad, cuyas coordenadas corresponden con N 31.71911; W 7.98279.

Día 3 de abril de 2010 (sábado)

RUTA: MARRAKECH-CASABLANCA, 246 KM.

Mezquita La Koutubia en Marrakech

Nada más levantarme me dirijo a la recepción del camping para contratar un autobús que nos desplace hasta el centro de Marrakech a de 9,00 horas y nos recoja a las 15,00 horas de vuelta.

Tengo tres objetivos en mente para tan corto espacio de tiempo: La Plaza Djemma El-Fná, el souk o zoco y las tenerías o curtidores de pieles.

En mi opinión, Marrakech junto Estambul forman parte de las ciudades con más contrastes y dotadas de una magia especial. Son ciudades llenas de olores diferentes, huelen a lujo, a miseria, a trabajo, a flores, a pescado, a incienso, a tabaco, a pasteles de pistachos, a rosas, a pies, a sudor, guano de paloma y así hasta el infinito. Una de las posibilidades del viajero es poder oler, y en lo posible identificar los sonidos del silencio, esa sensación la sabe muy bien los carecen de visión.

La Plaza Djemma El-Fná es el escaparate de la ciudad donde desde tiempo inmemorial se hacen las mismas cosas, la gente acude a la llamada de la fantasía porque todo es posible. Los encantadores de serpientes están en plena faena haciendo la misma representación que sus antepasados hicieron tres siglos antes, ahora buscan la limosna o la propina, voy suministrando monedas sueltas para que no se ofendan y me dejen fotografiar su espectáculo. En la actualidad tienen muchos detractores pero en mi caso me encanta el colorido de la escena. Las cobras bailan al sonar las flautas y se mantienen erguidas en tono amenazante, las víboras tiran dentelladas a sus patrones, estas últimas son guardadas dentro de una caja roja y las otras debajo de las panderetas, cada minuto comienza un nuevo acto del cuento de la mil y una noche.

Encantadores de serpientes Marrakech

Los encantadores de serpientes son de la etnia Aïssaoua y proceden de la región de Gulemim, además encontramos los mejores zumos de naranja a un precio inigualable 3 Dh. –no apto para escrupulosos– , puestos de comida o de frutos secos, mujeres haciendo tatuajes de Henna, bailarines, aguadores, contadores de historias, odontólogos improvisados, gente que lee las manos, lectores de periódicos, etc.

Después del baño de masas nos internamos en el colorido souk de Marraquech para practicar el shopping; aquí este ejercicio se eleva hasta la enésima potencia al ser considerado un arte. Como le vamos a dedicar tiempo y no tenemos nada que comprar que verdaderamente nos apetezca nos dejaremos llevar por nuestros instintos.

El conjunto de calles que forman la medina es mucho más pequeño e “intimo” al de su hermana mayor de Fez, aquí se mezclan los turistas con los habitantes de Marrakech, aquí se encuentra de todo, desde comida preparada, ropa, zapatos, artesanías de todo tipo y objetos de oro y plata. En sus orígenes estaba dividido en varias secciones de acuerdo a los artículos de venta, una especie de agrupaciones gremiales (souk de tapis para las alfombras, souk samarine para objetos de madera, piel, etc. souk Belaarif para el hierro forjado) en la actualidad se han ido mezclando pudiendo encontrar un mercado muy variopinto.

Etnia Aïssaoua, Marrakech

Muchos viajeros opinan que el regateo es una practica que es detestable pues siempre se siente engañados, yo opino lo contrario incluso me gustaría practicarlo en España, sobretodo cada vez que compro en el Corte Inglés.

El momento del regateo nos obliga a poner en juego diferentes cualidades, que debemos de ejecutar con el máximo equilibro, donde destacan: sutileza, elocuencia y matemáticas. Debemos ser firmes en los planteamientos iniciales y pacíficos respetando las reglas del juego. Debemos demostrar ocurrencia y también sencillez con el contrario. La picardía es nuestra baza pero sin ir de pillos. En última instancia tendremos que hacer ver que quien esta más interesado es el vendedor al comprador.

Es aconsejable no demostrar excesivo interés por el objeto deseado, siempre hay que poner el cebo distinto al que verdaderamente estamos interesados, dejaremos que el vendedor nos enseñe sus cartas para, después de repetidas negativas por parte del comprador y ante la posibilidad de perder una venta, el vendedor acceda a rebajar el precio al mínimo, según sus costes.

Souk de Marrakech

Uno de los dichos que se hace verdadero en Marruecos es “las prisas matan” esto en el comercio nos puede favorecer como compradores pues ellos saben que en la transacción deberá de ser breve, si somos firmes en nuestros planeamientos el éxito de la compra es nuestro.

Nada más salir la medina preguntamos por el barrio de los curtidores –no es fácil encontrarlo– , hacemos muchas paradas para confirmar el camino, hasta que se nos acerca Hassan que nos indica que le sigamos, nos llevará hasta nuestro destino. En el camino nos cuenta que el trabajaba allí, es miembro de una familia de curtidores, pero tuvo un problema en un ojo y aconsejaron a su padre que dejará los vapores que desprenden los procesos químicos del curtido de la piel. Gracias a esto su padre ha apostado porque vaya al colegio y tenga un futuro mejor, en principio nos parece el clásico busca vidas y estamos en guardia para terminar sentados en una tienda de alfombras, pero de repente se para en una puerta y me dice amigo hemos llegado “salam alikum” (la paz sea contigo) y le respondo “aleikum salam”, gracias por traernos y contarnos lo que encontraremos aquí. Esto nuevamente nos demuestra que no hay que tener miedo para pedir ayuda, siempre es posible encontrar a alguien que esta dispuesto a perder un minuto en ayudar a una familia perdida, sin pedir nada a cambio.

Tenería berebere en Marrakech

Básicamente Hassan ya me había contado que los curtidores se dividen en dos grupos, la tenería de los beréberes encargados de hacer los trabajos más pesados, peor pagados y obligados a trabajar las pieles más grandes –sobre todo la piel de dromedarios–; y la tenería de los árabes que es más pequeña, los obreros son mejor pagados, las pieles son más pequeñas –sobre todo pieles de ovinos– con una terminación mucha más delicada.

El barrio de los curtidores de Marrakech no es tan turístico como el de Fez, pero también es un sitio asombroso y maloliente donde encontramos solo hombres trabajando las pieles.

Nada más entrar al recinto aparece un tipo que nos ofrece hierbabuena para contrarrestar el olor natural del proceso –yo lo rechazo pues no me parece un olor desagradable–, las pieles en bruto se amontonan para ir pasando por casi un centenar de piscinas que completan todo el proceso. El guía me dice donde debo de fotografíar pues algunos trabajadores beréberes no les gustan ser retratados, primeramente las pieles son bañadas en sal, el cortado de pelo, luego pasan por un largo proceso químico natural, incluido el baño en color y termina con el secado.

Plaza de Djemma El-Fná, Marrakech

De regreso a la plaza de Djemma El-Fná nos quedamos a comer en unos de los múltiples restaurantes con vistas a la plaza, aprovechamos para saborear algunos de los platos marroquíes que nos faltan por probar.

A las 15,00 en punto partimos en el autobús con destino al camping, después de hacer nuestros deberes nos marchamos rápidamente con destino Casablanca.

Salimos unidos para conquistar nuestro último destino, tomamos directamente la autopista de peaje y esto nos hace relajarnos pues la conducción en Marruecos es difícil y se agradece en estos momentos; a las 19,30 horas estamos en Casablanca.

Intentamos aparcar y pernoctar en un parking aledaño a la Mezquita de Hassan II, nos recibe un guardia municipal que nos impide acceder al mencionado parking y nos recomienda ir al camping situado a 30 Km. de la ciudad.

Nos quedamos dudando que hacer pues es un problema ir tan lejos para regresar mañana y ver el monumento. Primeramente nos dicen que podemos aparcar pero cuando entramos nos indican que por motivos de seguridad nos debemos de marchar a las 22,00 horas. Lo que entendemos es que hoy ha estado el rey de Marruecos Mohamed VI en la mezquita de su padre Hassan II y por eso hay estas medidas de seguridad en el entorno de la mezquita. Después de identificar a todos los miembros de la caravana nos permiten la pernocta, las coordenadas corresponden con N 33.60585; W 7.63290 .

Mezquita Hassan II en Casablanca

Para celebrar la última cena como en la vida de Jesús nos marchamos hasta una pizzería cercana donde es sumamente complicado buscar sitio para 27 personas; a las horas que llegamos solamente nos ofrecen dos alternativas o un combinado de pinchos morunos con carnes o pizzas, con el jaleo que montamos nos traen lo que pueden y aceptamos de bien grado su hospitalidad pues lo que nos une es la necesidad de pasar juntos esta ultima noche.

Dormir viendo por la ventana la silueta iluminada de la segunda mezquita más grande del mundo y estar al amparo de Alá solamente esta en la mano de los autocaravanistas y es un lujo que solamente se valora por los que verdaderamente tenemos esa oportunidad.

Día 4 de abril de 2010 (domingo)

RUTA CASABLANCA-TÁNGER -342 Km.

La noche ha sido especialmente tranquila, me levanto una hora antes de la apertura de la mezquita y me dedico a fotografiarla desde todos los ángulos, incluso me invitan a ver algunas zonas en solitario.

La visita a la mezquita solamente se puede hacer en visitas guiadas, para los no musulmanes, el primer pase es a las 9,00, precio 120 dh por persona y niños 30 dh. Nos van agrupando por países formando grandes grupos, el grupo de españoles llega a formarse con cerca de 40 personas.

Mezquita Hassan II en Casablanca

La contemplación de la Mezquita de Hassan II de Casablanca ofrece sentimientos encontrados. Somos conscientes del gran sacrificio de ha tenido que hacer un país subdesarrollado para ejecutar esta suntuosa obra faraónica que se ha cifrado en más de 800 millones de dólares, además de la destrucción de todo un barrio sin que las autoridades ofrecieran ningún tipo de indemnización.

Los viajeros en la medida de lo posible debemos de pasar de puntillas por los conflictos interiores de los países que visitamos, en este caso nos debemos de conformar con la parte positiva.

La sola contemplación de la inmensidad monumental de la Mezquita es suficiente excusa para perdonar por los excesos cometidos, y si además pensamos en la regeneración urbanística de la ciudad, el empleo generado y el rescate de la tradiciones de miles de artesanos que han trabajado en su construcción, nos hace olvidar la parte negativa.

Mezquita Hassan II en Casablanca

La construcción de la mezquita se inicio en julio de 1986 y se termino el 30 de agosto de 1993 como celebración del 60 cumpleaños del rey. Fue diseñada por el arquitecto francés Michel Piseau –ejecutaría el mejor proyecto de su vida–, basado en la influencia árabe con inspiración en la Alhambra de Granada y la Mezquita de Córdoba. Como anécdota fue el arquitecto que construyo el pabellón de Marruecos para la Expo 92 de Sevilla, donde se encuentran similitudes con el estilo de la mezquita.

Durante la primera etapa de la construcción más 6.000 maestros artesanos marroquíes fueron empleados para trabajar en los materiales tradicionales: madera, piedra, yesería, rejería, para construir las elaboradas decoraciones que adornan toda la estructura. Cuando la construcción llegó a una segunda fase en 1990, y permanecieron 1.400 hombres que trabajaban de día y de más de 1.000 que lo hacían de noche para que el faraónico proyecto viera su luz.

La característica principal de la mezquita es la ubicación tan espectacular sobre una plataforma que se asoma al Océano Atlántico, donde una parte del suelo esta hecho en vidrio para que los fieles puedan arrollidarse sobre el mismo mar, aunque ese privilegio solamente se ha utilizado en la visitas reales, se construyo cerca del mar porque en el Corán hay un versículo dice que “El trono de Dios se hallaba sobre el agua”.

Tiene unas medidas que la hace el segundo edificio religioso más grande del mundo con 210 metros de altura que tiene el minarete le convierte en el más alto, inspirado en la Koutoubia de Marrakech. La planta de la mezquita tiene una superficie de 20.000 m2 que pueden llegar albergar 25.000 fieles. Se divide en la sala de oración (haran) en la planta baja, sala de abluciones y el hammam en la planta baja. Las puertas fueron construidas en titanio y se accionan eléctricamente y la fachada es de hormigón revestida de mármol y granito.

Interior de la Mezquita Hassan II en Casablanca

La cúpula con un impresionante artesonado en cedro dispone de una apertura eléctrica retráctil que se desplaza en dos secciones. De esta forma los fieles pueden contemplar el cielo y el mar de acuerdo con los deseos del monarca al arquitecto.

Por la noche, un rayo láser dispuesto desde el minarete ilumina a los fieles el camino hacia la Meca y que representa la vía hacia Dios. El edificio fue equipado con los mayores adelantos, fue calefactado el suelo.

En el interior prevalecen los arcos de herradura y las columnas están decoradas con mocárabes, en la bóveda un espléndido artesonado de cedro policromado.

A la derecha del Mirad se encuentra la galería de las mujeres, dos mezanines (balcones) protegidos con una intrincada celosías de madera tallada de cedro se encuentra colgada sobre la gran sala de oración.

En el sótano esta la sala de las abluciones esta inspirada en el patio de los leones de la Alhambra y esta construida con 41 fuentes de mármol exquisitamente tallado con forma de flor de loto, destacan las fuentes de los extremos que están comunicadas con la sala de oración por medio de una bóveda trasparente –de abajo arriba– que hace de linterna inversa.

Sala de la Abluciones de la Mezquita Hassan II en Casablanca

A las 10,00 horas abandonamos Casablanca y tomamos la autopista con destino a la ciudad de Tánger, en mitad del camino paramos en un área de servicio para comer, las coordenadas GPS del lugar, corresponden con: N 34.87591; W 6.21321 .

Por la tarde llegamos a Tánger y hacemos una parada técnica para visitar el supermercado Marjane, las coordenadas GPS corresponden con N 35°44'45.44" ; W  5° 50'40.86" . Los hipermercados en Marruecos abren todos los días del año hasta las 23,00 horas. Tenemos poco tiempo y vamos al grano porque hay un tesoro que no queremos abandonar del país sin comprar el aceite marca “Oued Souss”, embotellado en Les Huileries du Souss- Agadir (no es nada barato casi 4 euros), tiene un sabor característico dulce que hace identificarse en crudo como un aroma propio y agradable al paladar. Además hay tantas cosas para comprar: el vino de Mulay Idriss, los higos de Zagora, la miel, los pescados del Atlántico y sobre todo los pasteles, también se pueden encontrar productos procedentes de otros países árabes: Túnez y Egipto, y todo ello con una calidad y presentación occidental.

Mezquita Hassan II en Casablanca

Abandonamos el shopping rápido para llegar al puerto y someternos a la los rigores de pasar la aduana y los controles de inmigración. Primero pasamos por Acciona para canjear los billetes de embarque y tenemos una persona de la compañía para ayudarnos y que embarquemos en el último rápido del día. Las mujeres bajan para hacer la gestión ante las autoridades de inmigración, este tramite no las lleva más de 10 minutos, entretanto nos dedicamos al shopping con los vendedores ambulantes del puerto, queremos deshacernos de los últimos dirhams para hacer el último “change”, ellos saben que no estamos dispuestos a pagar más pues queremos dejar nuestros bolsillos vacíos de moneda marroquí, les hacemos una lista de los productos que queremos comprar, enseguida aparecen con una selección, en este tira y afloja nos falta algo para llegar a un acuerdo, les decimos que no hay nada más y para equilibrar el desfase nos solicitan una “lata de atún”, dicho y hecho, últimos dirhams + lata del Mercadona a cambio de una representación de la artesanía marroquí, ellos se ríen y nosotros nos destornillamos; acabamos de abrir un nuevo filón en el comercio, el próximo año en lugar de euros traeremos cientos de latas de atún.

Ahora nos queda la última aventura de este viaje, esperamos unos veinte minutos, cuando nos dicen que debemos de pasar por el escáner, dicho y hecho, enseguida nos meten en una zona delimitada y nos hacen bajar, efectivamente se trata de un escáner similar al de cualquier hospital, quince minutos más, nos devuelven al recinto de entrada donde un oficial revisa las conclusiones del escáner y nos autoriza al embarque.

No es tan fuero el león como lo pintan, seguramente tiene influencia la continua presión que tienen que hacer las compañías marítimas para cumplir con los horarios.

Nada más bajar del barco en Algeciras nos dirigimos a nuestro punto de pernocta en el parking del Lidl de Los Barrios, cuyas coordenadas corresponden con N 36,18136; W 5,43948.

Día 5 de abril de 2010 (lunes)

RUTA: ALGECIRAS-ZAFRA-MADRID-732 KM.

Nada más levantarme me dirijo al supermercado Lidl que en este momento esta lleno de autocaravanistas haciendo acopio de víveres antes de su embarque hacia África; en mi caso solamente compramos algunos complementos para el almuerzo, es una forma de recompensar con mi compra el que estos supermercados permitan nuestra pernocta en sus parkings.

El regreso lo hacemos por la autovía de la Plata; paramos para comer y vaciar en el área de autocaravanas de Zafra cuyas coordenadas GPS corresponden: N 38.2531; W 6.2438.

Al llegar a nuestro destino el marcador parcial del vehículo indica que en total hemos recorrido 3.465 Km., los doy por bien aprovechados.

 

Fotografías del viaje al desierto de Marruecos

 

-FIN-

CUANDO ACABA LA SEMANA SANTA, TODOS LOS PÁJAROS CANTAN

 

by

Ángel López

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