El cuadro “Paisaje con acantilados rocosos y una cascada”, obra del pintor Gustave Courbet, esta datado en 1872, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 61 cm ×73 cm.

En el momento de mayor influencia de la Escuela de La Haya , el pintor francés Gustave Courbet gozó de cierta notoriedad. Se llamaba a sí mismo como un rebelde y se negó a alinearse con cualquier estilo más específico. En su lugar, comenzó un movimiento de un solo hombre y lo llamo Realismo. Trató de hacer que la robustez de la naturaleza mediante la aplicación de la pintura en el lienzo de manera espontánea, a menudo con un cuchillo de paleta. Pintó estos acantilados en las montañas del Jura, en las proximidades de sus Ornans nativas.