La iglesia de la Santa Capilla se encuentra engullida en el Palacio de la Cité, residencia oficial del los reyes de Francia desde el siglo X hasta el siglo XIV. Fue construida por el rey Luis IX entre 1242 y 1248 para conservar las reliquias que había comprado pagado una suma que superaba el propio coste del edificio. La más famosa era la le faire passer “Corona de Espinas de Jesús”. Estas reliquias habían pertenecido a los emperadores de Constantinopla que las tenían desde el siglo IV: La corona fue enviada a Venecia donde se hizo el pago y se comprobó la caja y autenticidad de los sellos.

La caja se abrió en Sens en presencia de la familia real. Dentro estaba un arca de madera y más al fondo otra de plata que recubría un vaso de oro con la Corona de Espinas. De esta forma París adquiere tanta fama entre la cristiandad como Jerusalén y se convierte en la segunda ciudad de peregrinación.

El relicario de la Santa Capilla fue construido por el arquitecto Pierre de Monterau. La primera piedra del edificio fue colocada por San Luis en 1245, y tres años después la obra se dio por finalizada. La iglesia formaba parte del Palacio Real, perduro al derribo del Real de la Cité y no sufrió ningún cambio desde su construcción. Durante el periodo de la revolución es atacada y sufre un gran deterioro que solamente se salvan los vitrales.

La disposición del edificio en dos plantas es una de las novedades de la iglesia, situándose las reliquias en el piso superior para la veneración solamente del rey y sus más allegados, además de los religiosos encargados de los oficios. La capilla inferior era el lugar de culto para el personal de palacio.

La planta de ambos pisos es de una sola nave del tipo basilical y con un ábside en la cabecera semicircular, este modelo servirá de base para la construcción de otras Santas Capillas como la de Vincennes y la de Châteaudun.

La entrada a la capilla inferior esta presidida por la estatua de la Virgen, patrona de la iglesia. Destaca en las paredes la decoración policromada. En el ábside de la izquierda, hay un fresco de la Anunciación del siglo XIII. Es el mural más antiguo de París.

La bóveda esta rebajada y se sostiene gracias a unos pequeños arcos calados que se unen a las columnas con la bóveda central y las paredes laterales. Están decoradas con arquerías ciegas trilobuladas y 12 medallones en los que figuran los apóstoles.

La bóveda esta decorada con la flor de lis sobre un fondo azul que se alternan sobre las columnas con las torres de Castilla sobre un fondo púrpura, era el escudo de armas de la reina Blanca de Castilla, madre de Luis IX.

Para acceder a la capilla superior es por medio de una escalera interior de talla de madera, Viollet–le-duc, digo: que era la obra perfecta de la carpintería de su tiempo, por dibujo y ejecución.

La capilla superior contenía el relicario monumental, se decoro con esculturas y vidrieras para glorificar la Pasión de Cristo, se trataba de dar la impresión de haber accedido a la Jerusalén Celeste, bañada de luz y color.

Las 15 vidrieras contienen 1.113 escenas que representan la historia de la humanidad desde el Génesis a la resurrección de Cristo. Catorce de ellas representan episodios de la biblia:

1º El Génesis (el primer libro de la Torá).

2º El Éxodo (el segundo libro de la biblia y la Torá).

3º El libro de los Números (Libro bíblico del antiguo testamento).

4º Deuteronomio: el Libro de Josué (sexto libro del antiguo testamento).

5º El Libro de los Jueces (libro bíblico e histórico del antiguo testamento).

6º Izquierda, el Libro de Isaías (Libro profético del antiguo testamento), derecha, vara de José.

7º Izquierda, Juan el Evangelista, derecha, la infancia de Cristo.

8º La Pasión de Cristo (El camino a la cruz).

9º Izquierda, la vida de Juan el Bautista, derecha, Historia del Libro de Daniel (sexto libro profético del antiguo testamento).

10º El Libro de Ezequiel (libro profético del antiguo testamento).

11º Izquierda, El Libro de Jeremías (libro profético del antiguo testamento), derecha, el Libro de Tobías (narración antigua de origen judío).

12º Los libros de Judit y de Job (libros bíblicos del antiguo testamento).

13º El Libro de Ester (libro bíblico del antiguo testamento).

14º Los Libros de los Reyes (libro del antiguo testamento).

Todas ellas, se pueden leer de izquierda a derecha y de abajo a arriba.

15º La historia de las reliquias de la Pasión, su forma de lectura es serpenteante, empieza de abajo, de izquierda a derecha y sube de derecha a izquierda.

Las vidrieras que conforman el rosetón sur, fueron un regalo del rey Carlos VIII en 1485, con 86 cuarterones representan el libro profético de San Juan: el Apocalipsis (ultimo libro del nuevo testamento) aparece representado simbólicamente frente a la Pasión de Cristo en el vitral central de coro. En el centro del rosetón, Cristo viene con gloria al final de la vida para juzgar a vivos y muertos.

Los capiteles de la sala tiene una decoración foliácea colocada en las paredes laterales que se diferencian entre si. En las enjutas de las arquerías, los ángeles evocan las 42 escenas de los mártires que figuran en los cuadrifolios.

Los relicarios fueron colocados en un altar doble cubierto con un baldaquino. El viernes santo, los reyes solamente subían para la exhibición de las reliquias, se producían milagrosos milagros del mal caduc o epilepsia. Algunos objetos del relicario eran de carácter pagano y se conservaban como rarezas con grandes camafeos antiguos. Además de la Corona de Espinas, el rey adquirió un gran pedazo de la Vera Cruz, otra reliquia era el cráneo del propio rey a su muerte que fue encerrado dentro de un busto con su retrato. Era de tamaño natural, de oro con gemas preciosas y sustentando por ángeles, sobre una base sujetada por leones de plata dorada.

Entre las cinco estatuas originales que quedan de los apóstoles es la de San Pedro, el santo lleva las llaves del paraíso, las caras fueron tomadas de rostros idealizados entre los años 1240 y 1260.