La catedral de Orleáns es el edificio más representativo de la villa, sus amplias torres se levantan dentro de una fachada de estilo barroco, aunque el edificio general es de estilo gótico que sustituyeron a la antigua iglesia románica. Fue construida por mandato de Enrique VI con cargo al tesoro real, fue inaugurada en 1601 y se le dio el nombre de Catedral de la Santa Cruz. En la fachada principal se representan los apóstoles por los animales que la tradición les ha asignado: “El Ángel” a San Mateo, se le conocía por el evangelista, porque traza la genealogía de Jesús, “El León” de San Marcos, porque su Evangelio comienza con la evocación de Juan el Bautista en el desierto, “Tauro” de San Lucas y, finalmente, “El Águila” que representa a San Juan. Del exterior hay que destacar las gárgolas, eran consideradas en la antigüedad los guardianes del bien, y por extensión las iglesias. Su aspecto era terriblemente visible para recordarle que los herejes, los no cristianos, los enemigos de Dios en su conjunto que la protección divina ya estaba instalada en el edificio.
El interior, la planta mide 136 metros, las nueve capillas del altar mayor es la parte más antigua del edificio y datan del siglo XIII. La Capilla dedicada a Juana de Arco conmemora la liberación de Orleáns, el 08 de mayo de 1429.
En el siglo XIX se cambiaron las vidrieras de la parte inferior de la nave y se sustituyeron por las actuales que cuentan la historia de Juana de Arco que murió en la hoguera en la plaza de Ruán.
Otro de los cinco conjuntos de los vitrales hablan de la Pasión de Cristo. Desde el Jardín de Getsemaní a la resurrección a través de la muerte en la cruz son los temas que nos ilustran.
A la izquierda los vitrales hablan de los hechos relacionados con la historia de la Catedral de Santa Cruz, y en la otra ala, las diferentes ceremonias especiales que se han celebrado en la Catedral de Orleáns. |