El hospital de San Juan constituye actualmente la sede del Museo Jean Lurçat, que contiene una colección de tapices del siglo XX y que tiene una inspiración en el antiguo tapiz medieval de titulado de la “Apocalipsis” y que se expone en el Castillo de Angers.
Jean Lurçat era un reconocido pintor influenciado por el cubismo y el surrealismo. En 1937 conoce el tapiz del Apocalipsis y se influencia como una revelación estética y técnica y decide continuar su trabajo por la vía del tapiz. Comienza en 1957 los trabajos sobre un conjunto que titulará “Le Chant du monde” (El Canto del mundo) se considera la obra maestra del artista, donde nos presenta una obra llena de poesía y simbolismo sobre un manifiesto de una artista que se encuentra comprometido con la visión particular del Hombre en le seno del universo. Es un mensaje lleno de esperanza y de paz; hace referencia sobre unos hechos internacionales de grandes fricciones provocados por la Guerra Fría y la permanente exposición a la bomba atómica.
La mayoría del conjunto lo realiza sobre tapices con el fondo negro que resaltan lo colores vivos donde se representan la presencia del hombre y los animales o motivos siempre constantes referentes a la tierra, las plantas, las estrellas, etc.
Cinco tapices más completan el conjunto y los titula la arquitectura, la música, la danza y la luz, el aire y el fuego, la caza y la pesca. Otros tapices como el titulado la “Gran Amenaza”, muestra el peligro del ataque nuclear, donde se representa un águila que lanza una bomba sobre la Tierra, simbolizado por un circulo donde se puede ver los campanarios de Moscú, la Torre Eiffel de París, los edificios de Nueva York, las pirámides del Cairo, una pagoda de Pekín, el templo de Roma. En la explosión se puede leer la palabra “Hiroshima”. El siguiente lo titula “El hombre de Hiroshima”, hace una referente directa al bombardeo de Hiroshima, el 6 de agosto de 1945. Se ve la silueta de un hombre desintegrándose. El gran osario, es el título que nos habla del símbolo de maldición de la Edad Media, evoca el horror de la guerra. El final de todo, es el titulo que nos muestra la vuelta al vacío después de una explosión nuclear. El hombre en la gloria en paz, nos muestra la vuelta a lo vivo después de los desastres. Es la regeneración del mundo vegetal, animal y mineral. El agua y el fuego, nos muestra como el universo se reorganiza y comienza el buen funcionamiento del cosmos. Champagne, es el titulo que evoca el brote de la vida, aquí el artista invita a pensar en el aprovechamiento de nuestro actual mundo para disfrutar de la vida y los placeres. La conquista del espacio, evoca los adelantos tecnológicos de la sociedad del siglo XX. La Poesía, es el título donde se representan los signos del Zodiaco y nos evoca la auténtica dimensión del cosmos. Ornamentos Sagrados, este tapiz nos muestra referencias al viaje de Jean Lurçat visitando Méjico donde bajo esa influencia simboliza el ojo como centro del globo. |